¡Dichosas manchas pigmentarias de la cara! Ya podrían salir en el muslo o en medio de la espalda: así no molestarían, no las veríamos ni tendríamos que acudir al maquillaje para disimularlas. En fin, como decís más de una comentarista veterana en manchas oscuras de la piel, hay que tener paciencia y aprender a vivir con ellas.
Ello no significa que no podamos camuflarlas con un corrector o incluso con una pre-base de maquillaje: dependerá de si tienes un mapa mundi como yo o si están bien localizadas.
Si tus manchas están extendidas por todo el rostro, te vas a arruinar con el corrector de maquillaje. En ese caso es mucho mejor utilizar una pre-base de maquillaje: es un producto tan simple como el nombre, una base para antes de la base de color. El orden de utilización será: hidratante, pre-base y base de color.
Estas pre-bases se utilizan en maquillajes profesionales y vienen a ser un corrector en fluído. Antes no eran fáciles de encontrar pero hoy día tienes donde elegir en marcas como Smashbox en Sefora o Peggy Sage en tiendas propias. Pero debes elegir el que tenga color: ahora veremos qué tono.
Si tus manchas están muy localizadas, el toque mágico de un corrector será suficiente. Hidratante + corrector + base de maquillaje: piel visualmente más lisa en un plis. Nunca utilices un corrector-iluminador porque lo que queremos es esconder la mancha. No te prometo que desaparezcan las más oscuras pero sí se nota mucho la diferencia. Haz la prueba: unas manchas con corrector, otras sin él. ¿Se nota o se nota?
¿Qué tono elegir? Claro, dos puntos más claros que el tono de tu piel. Eso no tiene secreto: queremos hacer desaparecer una mancha oscura. Le aplicamos un corrector muy claro, aunque parezca que nos ha salido una peca blancuzca. Será la manera de que, tras la aplicación de la base de color adecuada a tu tono de piel, obtengas un rostro uniforme.
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En Arrebatadora | Un vistazo a los distintos tipos de prebases de maquillaje, Los mil y un usos del corrector de ojeras