En algún momento a todas nos llega un momento en que nos preocupamos de las imperfecciones. Y allí descubrimos la poderosa ayuda que nos pueden dar los correctores. Sin embargo, hay tantas texturas diferentes que escoger uno puede ser bastante difícil: hay correctores en barra (stick), en tarrito, tubito, pincel, lápiz (como un eyeliner), compactos e incluso el lápiz iluminador, que aunque no es un corrector, ayuda a disimular ciertas imperfecciones. ¿Cómo elegir el más adecuado?
Aunque no será la única decisión que tendremos que tomar antes de tener el corrector perfecto, la parte de seleccionar la textura más adecuada no es tan difícil. Solo hay que recordar dos cosas: una es que los correctores más secos se adhieren mejor y duran más; la otra es que en las zonas del rostro que se mueven (donde están las líneas de expresión) los correctores secos pueden resquebrajarse con más facilidad y hacer las líneas aún más notorias.
Así, si buscáis disimular círculos oscuros bajo los ojos, escoged correctores muy hidratantes y cremosos, como aquellos que vienen con pinceles o en tubitos, como el Magic Concealer de Helena Rubinstein, el favorito de Isabel. Si el que tenéis no es suficiente y se siguen marcando finas líneas, probad a poner más crema de contorno de ojos en la ojera o mezclar el corrector con ella.
Para imperfecciones muy chiquitas, como pequeños capilares rotos o venitas marcadas, el lápiz corrector (no el iluminador) es una buena opción porque ofrece mucha precisión y permite cubrir exactamente el problema. Son perfectos para granitos que no son grandes: si usáis el mismo tono de la piel desaparecen por completo. No siempre son fáciles de encontrar, en especial si buscáis colores distintos al color piel. En la foto veis tres opciones, una barata y dos más caras.
Si hablamos de manchas de sol o decoloración de la piel, la fórmula densa y un poco seca de los correctores compactos, en barra o en tarrito puede ser perfecta por su cobertura y duración. Estos son los más fáciles de encontrar: los hay en todos los colores, marcas y rangos de precios.
De estos últimos tipos de correctores, hemos probado dos paletas multicolores, una de Coastal Scents y otra de Make Up Designory, el Creamy Concealer kit de Bobbi Brown, los correctores verdes de Chanel y Deliplus y el corrector de Bobbi Brown (que es un pre-corrector para ojeras muy oscuras, no un corrector. La confusión la causa su nombre en inglés, corrector: el corrector normal se llama concealer).
He dejado para el final a los más confusos de todos los productos correctores: los correctores – iluminadores o lápices iluminadores. Ya conocéis la teoría de que lo oscuro esconde y lo claro destaca, ¿verdad? Pues bien, los lápices iluminadores contienen partículas que reflejan la luz, lo que “levanta” o destaca el lugar donde fue aplicado, como el surco bajo las bolsas de los ojos o el surco nasogeniano, lo que “elimina” la imperfección. Pero en realidad no son correctores sino iluminadores, así que no sirven para aplicarlos en cualquier imperfección.
Ya habréis notado que no he dicho nada de los colores de correctores más adecuados para contrarrestar el tono de cada imperfección. Por una parte, eso amerita una enciclopedia (aunque Carolina escribió una guía rápida) y por otro, a pesar de toda la información que hay en la blogósfera, la mayoría de las imperfecciones que deseamos disimular no tienen un solo tono, así que tenemos que usar el método de prueba y error para adaptar las recetas a nuestras necesidades específicas.
Entre nosotras, aprender todo esto me ha llevado mucho tiempo. A veces me disgusta que sea tan difícil tomar decisiones informadas, incluso si logramos la ayuda de una dependienta experta en cosmética. Pero así es la vida, nada más ni nada menos.
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