Pocas mujeres se salvan de sufrir una alteración de la piel a lo largo de su vida, las carencias o excesos en la alimentación, el alcohol, el tabaco, la contaminación, el sol, cosméticos inadecuados o cambios bruscos de temperatura agreden la piel y da a lugar problemas posteriores. La alergia, el acné, puntos negros, cuperosis y manchas pueden amargarnos y hay que ponerles remedio cuanto antes.
Las alergias de contacto es una reacción inmunológica de hipersensibilidad que puede hacer acto de presencia cuando usamos productos varias veces o por el contrario nos sale a la primera de cambio. Cada piel lo puede mostrar de una manera distinta, picor, enrojecimiento, eczema, dermatitis e hinchazón son las más populares.
Por el contrario podemos estar perfectas y sin embargo sufrirlas por cualquier cambio efectuado en nuestra rutina diaria. Cuando se produce una reacción alérgica, la piel queda sensibilizada al producto que la originó y lo hará cada vez que entre en contacto con el. Cuando notes cambios en el transcurso de unas 48 horas después de haber cambiado el maquillaje, la máscara o alguna crema, deja de usarlo inmediatamente.
Si notas últimamente que tu piel esta más sensible prueba con productos hipoalergénicos y para evitar sorpresas aplícatelos antes en la parte interna de la muñeca, espera 48 horas y si no notas nada, ya los puedes usar con seguridad. Todas las pieles tienen probabilidades de sufrir algún tipo de alergia, las partes más propensas son los párpados, el contorno de ojos, la boca, el cuello y las manos.
Si te pasa muy a menudo será conveniente consultar al médico para hacerte las pruebas de alergia, así se identificará el alergeno causante. Recuerda que algunos ingredientes están presentes en muchos cosméticos.
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