Después de las fiestas y celebraciones de Navidad muchas personas nos proponemos perder el peso ganado por los excesos de comida o empezar a alimentarnos mejor como propósito de Año Nuevo. Una de las consecuencias que sobrevienen con esto es que podemos acabar cayendo en soluciones rápidas, pero poco efectivas, como las dietas milagro.
Entre algunas de esas medidas que nos prometen ayudarnos a perder peso en muy pocos días encontramos los batidos y los zumos que forman parte de lo que se conoce como dieta detox. En principio, la idea puede parece razonable, ya que el malestar estomacal que nos puede provocar la sensación de estar intoxicados y necesitar depurar nuestro estómago. Sin embargo, esto no es correcto y, por desgracia, las dietas detox no funcionan. Es más, pueden llevarnos a ganar más peso adicional.
Qué son las dietas detox
Se trata de un tipo de dietas presuntamente depurativas que se basan en el consumo de algunos líquidos - generalmente zumos y batidos - durante unos días. La idea es que durante un tiempo limitado no consumamos nada más que dichos líquidos, para así ayudar a depurar y desintoxicar nuestro cuerpo de todos los excesos previos y, por tanto, conseguir perder peso.
Normalmente, este tipo de bebidas está compuesta de alimentos que en principio parecen saludables, como las verduras o las frutas. Además, contienen elementos que, en otras circunstancias, consideraríamos beneficiosos por sus propiedades antioxidantes o sus nutrientes. Sin embargo, la realidad es que las evidencias científicas no han encontrado ninguna prueba de que este tipo de dieta sea efectiva. Es más, lo que sí se sabe es que pueden ser peligrosas para nuestra salud.
No necesitamos eliminar toxinas
Lo primero que debemos saber es que ningún alimento, por muy poco saludable que sea, nos deja toxinas en el cuerpo que debamos eliminar posteriormente. Lo que sí pueden quedar es alguna sustancia que debamos eliminar después de la digestión, por no ser necesaria para nuestro organismo. De esta tarea se encarga nuestro sistema digestivo, ayudándonos a eliminar de manera natural los deshechos que no necesitamos, con ayuda del hígado.
En el caso de que tuviéramos algún tipo de toxina real en nuestro organismo, como puede ser el veneno, o algún otro químico, necesitaríamos ayuda médica. Por lo tanto, para lo primero nuestro organismo ya está perfectamente capacitado por sí mismo, sin necesidad de ayuda de dichos batidos y zumos, y para lo segundo no es de ninguna utilidad.
Los peligros de la dieta detox
Ya sabemos que este tipo de dieta no funciona para desintoxicar nuestro organismo, principalmente, porque no hay nada de lo que desintoxicarlo - y si lo hay un zumo no lo va a arreglar -. Sin embargo, algunas personas pueden pensar que quizás sí que sirvan para perder peso de manera efectiva y rápida.
La realidad es que tampoco son útiles para esto y, además, pueden ser peligrosas. Este tipo de dietas son extremadamente restrictivas, y resultan en la eliminación - por varios días - de grupos enteros de alimentos. Al restringir estos alimentos no solo estamos quitándonos las calorías que nos aportan, sino también todos los nutrientes que contienen, mucho de los cuales son necesarios para nuestro organismo.
Esta restricción puede provocarnos importantes carencias nutricionales, además de acabar estresando a nuestro cuerpo. Esto puede traducirse en una mayor sensación de hambre y ansiedad hacía la comida que puede acabar en un atracón.
Otro de los problemas de esta dieta es el efecto rebote que puede provocarnos. Al restringir los alimentos de manera tan drástica, nuestro cuerpo entra en un estado que podemos considerar de reserva. De esta manera, nuestro metabolismo se adapta, ralentizándose, ya que no sabe cuándo va a volver a ingerir alimento y necesita guardar las fuerzas. Cuando volvamos a comer con normalidad, nuestro metabolismo seguirá lento y hará un gasto de energía (calorías) similar al que estaba haciendo mientras estábamos cumpliendo con la dieta.
Esto, básicamente, quiere decir que después de la dieta nuestro cuerpo metabolizará de manera mucho más lenta los alimentos que ingiramos, provocando que aumentemos de peso más rápido. Pudiendo, así, ganar más peso del que hayamos perdido. Por supuesto, no existe ningún ingrediente dentro de dichos batidos o zumos que vaya a quemar nuestra grasa corporal para que no vuelva nunca más.
La única manera saludable de perder peso es adoptando una dieta saludable, que nos genere adherencia y podamos mantener para toda nuestra vida, no solo unas semanas. Además, esta dieta debe complementarse con algún tipo de ejercicio físico que nos ayude a mantenernos activos y a mejorar el rendimiento de nuestro metabolismo. Las dietas detox no son nunca una opción ni útil, ni saludable, ni segura.
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