Imagino que como yo, os habréis fijado que de unos años a esta parte, Corea está dando mucho que hablar por su dinamismo, su apertura al resto del mundo y también por los numeros eventos que están teniendo lugar en Seúl. Recordemos que Lagerfeld decidió celebrar allí la colección crucero de Chanel atreviéndose, incluso, a utilizar los cinco colores que simbolizan la bandera del país y algunos guiños al hanbok, su vestimenta tradicional.
La maison Dior inauguró también en Seúl su mayor flagship en el mundo por medio de un edificio de formas futuristas realizado por el arquitecto Christian de Pontzamparc. Pero la cosa no quedó ahí, pues la marca aprovechó para que los coreanos descubriesen el espíritu Dior a través de una exposición celebrada en un famoso monumento diseñado por Zaha Hadid, con la colaboración de seis artistas locales Do-Ho Suh, Lee Bul, Heryum Kim, Kim Dông-Yoo, Kiwon Park et Seon-Ghi Bahk) contratados para que reinterpretaran este famoso espíritu.
Efecto dominó
Como ocurrió cuando se vieron obligados a despedir a John Galliano, los responsables de Christian Dior parecen estarse planteando un período de transición a la espera de encontrar a un digno sucesor para el creador belga Raf Simons, quien dimitió de su puesto como director artístico de las colecciones para mujer el pasado mes de octubre, a punto de morir de éxito, agotado por el frenético ritmo de tener que diseñar dos colecciones haute couture al año, dos prêt-à-porter, dos colecciones crucero, ocuparse de las campañas publicitarias, de los trunk shows, y un largo etcetra.
Según un portavoz designado por la marca, las próximas dos colecciones, la de haute couture para el verano del 2016 y la del prêt-à-porter del otoño-invierno 2016-2017, serán realizadas por un equipo interno.
Cada vez más diseñadores parecen querer evitar el Síndrome Burn Out
Antes de contratar a Raf Simons en abril del 2012, la cúpula de Christian Dior se dio todo un año de plazo, confiando hasta entonces en Bill Gaytten - la mano derecha de Galliano -, durante esa fase de transición. Según parece, el segundo de Raf Simons, Pieter Mulier, también ha abandonado el barco. Y es que el ritmo impuesto por Zara, que renueva el stock de sus tiendas con nuevas colecciones cada 15 días no es fácil de seguir (ni siquiera para su competencia más directa).
Después de la salida de Raf Simons de Dior, le tocó el turno a Lanvin tener que despedirse de Alber Elbaz. Encargado del diseño de la marca desde el 2001, Elbaz supo devolver a la vida a esta venerable firma que en el 2014 cumplió 125 años. Después de haber debutado en Nueva York con Geoffrey Beene, este diseñador nacido en Casablanca, desembarcó en Guy Laroche, y luego en Saint Laurent antes de instalarse definitivamente en Lanvin. Su estilo delicado, sensual y atemporal lo convirtieron en el niño mimado de la prensa. Si algo caracterica a Elbaz es que viste a la mujer, y no la disfraza.
Pero eso no es todo, no podemos pasar por alto la salida de Alexander Wang de Balenciaga tan sólo tres años después de su desembarco y de haber aumentado considerablemente sus ventas. Wang llegó para sustituir a Nicolas Ghesquière que fichó por Louis Vuitton. ¿Otro diseñador afectado por el síndrome Burn Out?
Pero la vida sigue, y después de muchas quinielas, esta prestigiosa marca de moda que pertenece al grupo Kering confirmaba el anuncio de su nuevo fichaje, Demma Gvasalia, un diseñador de origen georgiano formado en Amberes con conocimientos empresariales, que ya había trabajado anteriormente a las ordenes de Marc Jacobs y del propio Ghesquière.
Demna Gvasalia, que quedó finalista en los premios que LVMH otorga a jóvenes diseñadores emergentes, cuenta con poder compaginar su trabajo en Balenciaga con el de su propia marca, "Vetements" en la que ha apostado por rediseñar los patrones de los básicos más deseados, pero dotándolos de un nuevo twist.
A este ritmo, el baile de todos estos grandes diseñadores, cada vez más expuestos y empujados hasta sus límites, no parece que vaya a parar. Entre la mundialización y las redes sociales parece que en la actualidad el auténtico lujo es disponer de tiempo, para poder volver a disfrutar diseñando y confeccionando con pasión y mimo. Y es que la sombra de Alexander McQueen es alargada, y pocos son ya los que están dispuestos a pasar por ese estrés laboral que les conduce a un estado de agotamiento físico y emocional que les puede llegar a pasar factura.
Volver a empezar
El problema viene después, como le está pasando a Tom Ford, ya que no es lo mismo disparar con salvas del rey que tener que aflojarse el bolsillo para tener que pagar uno mismo todos los gastos devengados. Sobre todo cuando uno se ha acostumbrado a disponer de lo bueno, lo mejor. Me estoy refiriendo a la fórmula empleada para dar a conocer a los medios, a clientes y a compradores las nuevas colecciones: vídeoclips, eventos privados muy exclusivos en las boutiques "para poder transmitir de primera mano el espíritu de las nuevas colecciones"...
Mujeres reales vs Mujeres biónicas
Y es que, para conectar de verdad con la gente, las marcas no dudan en proclamar que diseñan pensando en mujeres reales, apostando por la diversidad de cuerpos, tallas y siluetas, contratando incluso para sus desfiles a Jamie Brewer, a Madeline Stuart - las primeras mujeres en desfilar durante la Fashion Week neoyorquina con síndrome de Down -, a Rebekah Marine (la primera mujer con un brazo biónico), o a Winnie Harlow, la modelo con vitíligo que aparece hasta en la sopa..
Aunque luego los organizadores de estos mismos certámenes se vean obligados a mirar con lupa a las modelos presuntamente anoréxicas, para que luego leyes como las aprobadas por Marisol Touraine no condenen a las agencias de modelos a penas de cárcel de hasta 6 meses, y multas que pueden alcanzar los 75.000 euros.
Por eso, tampoco es casualidad el que la prestigiosa fotógrafo Annie Leibovitz haya apostado por presentar a 13 mujeres que destacan por sus logros profesionales, culturales, deportivos y artísticos coincidiendo con la 43a edición de el famoso Calendario Pirelli para el 2016. Un calendario que no se parece en nada a los anteriores pues aunque se trata de un ejercicio fotográfico del desnudo, esta vez se han fotografiado mujeres reales y sin pretensiones, por medio de retratos en blanco y negro realizados en un estudio.
El auge imparable de las redes sociales
En los últimos años, el auge de las redes sociales ha experimentado un crecimiento inimaginable, que está obligando a la grandes marcas del mundo del lujo y de la moda a adaptarse. La fiebre por dar a conocer una marca hasta el otro extremo del mundo se ha extendido como un reguero de pólvora sin valorar si el tener millones de followers supone mayor influencia social o si va a actuar sobre ellos - sobre todo, a la hora de fomentar las ventas.
Todos los indicios coronan a los Youtubers como los influencers más relevantes del universo 2.0
No olvidemos que la moda es, ante todo, un negocio -. Aunque todo estos números (inflados) contribuyen a alimentar el ego personal de las empresas, resultan en realidad muy poco significativos pues tener millones seguidores no se traduce en dinero con el que poder seguir creando y creciendo.
Esta es la razón por la que a Demna Gvasalia no le importan los "likes" en Instagram, pues opina que es una herramienta de promoción fácil y accesible, pero que si la gente que te sigue no compra ni lleva tu ropa poco importan cuántos likes se tengan.
Lo mismo podríamos decir de los bloggers que parecen llamados a ser sustituidos por los Instagramers o los Youtubers, ya que sólo colgando una foto o un vídeo consiguen muchos más seguidores, tantos que han empezado a llamar la atención de numerosas marcas y anunciantes. El vídeo online se ha convertido en el formato favorito de los consumidores. Un reciente estudio asegura que el próximo año el vídeo supondrá el 69% de todo el tráfico de Internet, lo que traducido significa más de 19.000 millones en inversión publicitaria, lo que coronaría a los Youtubers como los influencers más relevantes del universo 2.0.
Nuevas formas de comunicar
Lo cierto es que las formas de comunicar también han cambiado enormemente. En un mundo global donde todos estamos conectados gracias a Internet, ya no tiene sentido lanzar un producto o una colección en un país antes que en otro.
Hasta hace muy poco, los directores de las agencias de comunicación solían ofrecer los visuales de las nuevas campañas de las marcas que representaban a ciertas revistas que eran un referente en el sector en primicia. Ahora, en muchas ocasiones esto ha dejado de tener sentido. Una vez que las imágenes están subidas a Internet, están a disposición de todo aquel que se quiera molestar en buscarlas (aunque esté en las Antípodas). Basta con empezar a tirar del hilito.
A punto ya de despedir el año, así están las cosas. Lo que nos vaya a deparar el 2016 está aún por ver, pero aquí estaremos al pie del cañón, para procurar contároslo puntualmente y, a ser posible, antes que nadie. De momento parece que todos los ojos apuntan hacia Río de Janeiro, un destino que quizá nos depare exóticas aventuras llenas de color y optimismo.
Fotos | Cordon Press
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