La temporada de edredones ha empezado oficialmente y, por delante, nos quedan muchos meses de hacer ejercicio quitando y poniéndole la funda. Y es que la parte menos buena de poder cambiar con tanta facilidad el diseño de nuestro nórdico es que es más ropa de cama que hay que lavar. Incluso, si a simple vista no parece sucio, es necesario hacerlo para reducir la acumulación de gérmenes, bacterias y ácaros del polvo. Así que, esto quiere decir que vamos a tener, al menos, dos juegos de fundas en rotación para poder usar una mientras la otra se seca.
Cuántos más inviernos suma una persona, más fundas de nórdico acumula. Es un viejo proverbio chino que me acabo de inventar pero que debería existir. Fuera bromas, yo ya tengo tres entre las que elegir según estilo y mood. Sin embargo, el espacio de almacenaje no es que me sobre en casa y la verdad es que este tipo de ropa de cama abulta más de lo que me gustaría. Seguro que a ti también te pasa.
Por suerte, no hay nada que Marie Kondo no sepa cómo comprimir con un par de dobleces. Lo ha demostrado con las toallas, los abrigos e incluso con los mismísimos edredones. Así que podemos también aplicar el método KonMari para doblar las fundas del nórdico y que no se coman tanto espacio en nuestras cajoneras y armarios.
Sea del tamaño que sea nuestra cama, la funda nórdica va a ser siempre una pieza de gran tamaño. No obstante, según sea la profundidad de nuestros cajones puede que nos convenga más uno u otro de estos dos métodos.
Método sencillo
- Ponemos la funda nórdica del revés en el caso de que no la hayamos lavado ya de este modo.
- Extendemos la funda nórdica en una superficie plana y lisa.
- Doblamos por la mitad por el lado más ancho de la funda y hacemos lo mismo después con el lado más largo.
- Cogemos el lado que queda mas corto (si no sabes cuál es puedes comprobarlo doblando la funda en diagonal) y doblamos por ambos extremos en tercios.
- No obstante, uno de los dos extremos a lo largo tienes que dejarlo un poco más ancho que el otro porque va a hacer de bolsillo.
- Doblamos ambos extremos hacia la mitad y metemos un lado en el bolsillo que hemos creado en el otro.
En forma de rollo
- Doblamos la funda nórdica en longitud hasta formar una franja estrecha.
- Después, ve enrollando a lo largo bien apretado y cierra con una cinta.
Foto de portada | Annie Spratt
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