Las etiquetas de la ropa son un espacio terriblemente mal aprovechado por las marcas. Y eso que, en ocasiones son kilométricas. Entendemos que tengan que incorporar por algún lado el nombre de la firma, los componentes de la prenda y las instrucciones de lavado pero, ¿de verdad que no queda espacio para unas palabras bonitas?
Ahora que los mensajes en camisetas y sudaderas están tan de moda, llevar uno escondido contra nuestro cuerpo como un secreto que solo nosotros conocemos y que nos hace soltar una risita, nos parece un aliciente magnífico para sobrellevar la a veces tediosa rutina del día.
Vale un piropo que te anime un "bad hair day", un consejo o esa frase que te haga dejar de comerte la cabeza y comprarte de una vez por todas esos pantalones a los que tantas vueltas les estás dando dudando de si pasar con ellos por caja.
Así, inspirados por iniciativas como esta de Collina Strada, nos hemos animado a imaginar qué mensajes nos gustaría encontrar en las prendas de nuestro armario y de aquellas que nos probamos en las tiendas.
Si te queda pequeño, no te preocupes, hacemos fatal las tallas y pensando en las modelos.
Eso es así y lo sabes.
El cuerpo cambia constantemente a lo largo de la vida, si no te gusta ahora, lo hará en otro momento.
Para bien o para mal, es inevitable.
Los carbohidratos dan más felicidad que caber en esta talla.
También el queso. No se trata de quién puede resistirse a una pizza cuatro quesos sino de quién en su sano juicio quiere hacerlo.
La vida no es perfecta pero tu look puede serlo.
Eso de que la perfección no existe no aplica al mundo de los outfits.
Cindy Crawford también tiene celulitis.
Puedes corroborarlo fácilmente en la red.
Recuerda que lo que te queda bien a ti, no le queda bien a otras personas y viceversa.
Aunque si, a pesar de que no te favorezca, quieres ponértelo igualmente, la decisión es completamente tuya.
Trabajas muy duro ocho horas al día, me mereces.
¿Para qué ibas a aguantar a tu jefe si no?
La vida es muy corta para llevar ropa aburrida.
Para aburrirnos ya tenemos los uniformes. Mejor es que te miren que no pasar desapercibido como si nunca hubieras existido.
La ropa no va a cambiar el mundo pero sí las mujeres que la visten.
No le des importancia en exceso a lo que no lo tiene. Cuando te miras al espejo con ese conjunto, lo único importante en ese reflejo eres tú.
No eres una croqueta, no puedes gustarle a todo el mundo.
Y menos mal que no lo eres o tendrías que comerte a ti misma.
La vida ya es demasiado difícil como para encima no comprarte estos zapatos.
Los problemas vienen solos, las cosas buenas hay que buscarlas.
Lo más importante en un vestido es la mujer que lo viste.
Y esa eres tú.
Los días que el mundo te pueda y te falte confianza, yo prometo dártela.
Hay ropa y pintalabios rojos con ese poder.
Soy la armadura que te ayudará a enfrentarte a la realidad del día a día.
La ropa siempre es tu aliada. Que no te afecte cuando algo no te queda bien. Simplemente sigue buscando tu armadura.
Juntos vamos a gustar más que el pan con queso.
Tranquila, no se refiere al roquefort.
Independientemente de si te quedo bien o mal, tú ya eres maravillosa.
Léase con voz de Christina Aguilera cantando Beautiful.
No me llamo Google pero durante un rato puedo ser todo lo que buscas.
Un buen subidón poscompra y de día de estreno revive a un muerto.
Me siento muy afortunado/a de que quieras tenerme en tu armario.
Por si no te lo había dicho nadie últimamente. Cambiando "armario" por "vida", claro.
A pesar de todo, lo importante está en el interior.
Ya lo decía Antoine de Saint-Exupéry.
En la vida no lo puedes tener todo pero a mí sí.
Una verdad como un piano.
Los días que estés por los suelos, yo te levanto (para zapatos de tacón).
Literalmente, además.
Fotos | Instagram "Etiquetaspararopa".
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