La ropa nos vuelve locas. Es increíble las vueltas que le damos a lo que compramos, a lo que nos ponemos y a lo que nos queda mal o bien. Increíble también es la capacidad que tenemos de autoengañarnos y contarnos mentiras para convencernos de lo que no es. Tranquila, no eres la única. Todas con contamos estas mentiras sobre al ropa alguna vez.
No tengo nada que ponerme. Todas nos quejamos de que no tenemos suficiente ropa, pero en nuestros armarios no cabe nada más. Por algo será, así que pon tu imaginación a trabajar, inspírate en los blogs de moda y luce de manera distinta las prendas de siempre.
En cuanto me quite un par de kilos, cabré en esta falda tan mona. Nos compramos una falda de una talla menos para motivarnos a la hora de adelgazar y el resultado es que la falda se queda con la etiqueta puesta a la espera de que en un universo paralelo tengamos el cuerpo de Gisele. No todas tenemos un entrenador personal como las famosas.
Seguro que pronto tendré una ocasión en la que estrenar este vestido de fiesta. Seamos realistas, esas vestido de fiesta que te compras "por si acaso", es demasiado elegante para tu día a día, y salvo que tengas la vida social de una blogger top, no te lo vas a poner en un futuro cercano.
No importa que me compre una camisa blanca más, total es una prenda de fondo de armario. Sí, igual que esas 3 camisas blancas que ya tienes, las cuales, efectivamente, están en el fondo de tu armario muertas de risa. Por mucho que necesitemos básicos en nuestro armario, no necesitamos la misma prenda cinco veces.
Mira que bien le queda eso a la famosa/blogger de turno, voy a comprármelo igual para lucir tan bien como ella. El "copia su look" (que tantas veces hacemos todas, yo la primera), nunca queda igual, primero porque no tenemos su tipo, y segundo porque ellas posan para la foto, calculando la manera de parecer más delgadas, más perfectas, y haciendo que la prenda siempre luzca mil veces mejor.
Estos tacones altos me harán parecer más alta. También te pueden hacer parecer una cigüeña si no tienes práctica suficiente para caminar con ellos o te pueden provocar un esguince de tobillo.
Me seguiré poniendo la misma ropa después de ser madre. Para empezar, hay que quitarse los kilos de más después del embarazo, y además, hay prendas que son muy poco prácticas y que corren un grave riesgo con un niño pequeño al lado. Olvídate de los collares grandes de los que tu hijo se colgará, de los pantalones blancos que siempre tendrán manchas, de los jerséis de cachemire que acabarán vomitados, y de los zapatos imposibles con los que no puedes echar a correr detrás de los niños.
Voy a guardar esta prenda vieja porque seguro que en algún momento se vuelve a llevar. La guardas al fondo del armario porque está pasada de moda con la esperanza de que vuelva a ser tendendia en algún momento, el problema es que cuando la moda vuelve, no quieres ese pantalón de campana de hace diez años, sino que quieres uno nuevo, por supuesto.
Este pantalón me hace gorda. No te engorda el pantalón, sino los helados, el chocolate, las hamburguesas y los dulces, además, seguro que no te sobra ni un solo kilo, hay que mirarse con mejores ojos.
¿Has pasado el test? ¿De cuántas de las mentiras te declaras culpable?
Fotos | Cordon Press
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