Seguramente en muchas ocasiones te has encontrado con el dilema de que necesitas realizar una actividad importante o afrontar situaciones que debes de atender, pero hay algo dentro de ti que prefiere dejarlas de lado o posponerlas, eso es la procrastinación: el retrasar actividades sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o placenteras por miedo a afrontarlas. Si te has identificado con esta sensación te invitamos a seguir leyendo para que conozcas cinco pasos infalibles con los que deshacerte de una mala actitud que te impide avanzar hacia tus objetivos.
Enfócate en tu identidad
Muchas veces el hecho de fijarnos metas demasiado altas nos obliga a dejarlas de lado por considerarlas imposibles o difíciles de alcanzar. Para este primer paso enfócate en objetivos que suenen realistas, pero que a la vez te motiven para lograr la meta a la que quieres llegar. Por ejemplo: en lugar de pensar ser el mejor baterista de la historia, visualízate como un hombre al que le apasiona la música. Con decretos como éste, mentalmente tenemos una motivación para lo que queremos hacer y no la presión de una meta por cumplir.
Especifica fechas, horas y tiempos
Este consejo viene más al caso por todos aquellos que ya no recuerdan sus propósitos de año nuevo: 'Este 2020 comenzaré a hacer ejercicio', Ok, ¿pero cuándo? El fijarse horarios, fechas y lugares establecidos ayuda a crear un compromiso más sólido que el pensar en 'algún día voy a...'. Así, si te fijas la meta de realizar una actividad, el destinarle un espacio y un tiempo específico te será más fácil llevarla a cabo (y por supuesto) finalizarla.
La creatividad te encuentra trabajando
Suena una frase muy trillada, pero es verdad: los mejores momentos de inspiración llegan justo cuando estamos trabajando. Si quieres pintar, dibujar, escribir o componer una canción, no esperes a que una revelación en un sueño te ilumine la mente: siéntate frente a un lienzo en blanco o ante el teclado de tu computadora y deja que las ideas fluyan.
Crea hábitos para lograr metas
Comenzar a crear hábitos es lo más difícil de emprender algo nuevo, sin embargo es la mejor forma de acercarnos a nuestras metas. Una de las formas en las que podemos lograr nuestros objetivos es la de reducir las tareas difíciles o que nos llevarán mucho tiempo. Si quieres limpiar el garage dedícale diez minutos de tu tiempo cada día, así podrás ver que en la rutina de organización notarás un avance significativo que te impulsará a seguir con la tarea.
Combina las tareas aburridas con las que no lo son
Este método se denomina emptation bundling o grupo de tentaciones: se trata de combinar en una sola actividad lo que tienes que hacer, con lo que te gustaría hacer al mismo tiempo. Para llevarla a cabo escribe en una columna las cosas que disfrutas hacer y actividades que quieres llevar a cabo; y en la otra, las que no puedes postergar y las obligaciones que tienes durante el día. Al escribir todas las actividades posibles podrás encontrar vínculos entre unas y otras para poder realizarlas al mismo tiempo, como ver una serie en Netflix mientras haces ejercicio en tu bicicleta estática o hacerte un corte de cabello mientras respondes a tus correos electrónicos.
Como te habrás dado cuenta, hacer frente a situaciones y compromisos es mucho más fácil cuando se tiene una organización perfecta para llevarlas a cabo.