Para todos aquellos que nunca os habéis hecho una limpieza de cutis, esas cosas de cristal en el aparato Belex (foto principal) son electrodos-aplicadores para la alta frecuencia durante un tratamiento facial. La alta frecuencia es un tipo de corriente eléctrica que tiene propiedades muy beneficiosas para la piel.
La esteticista lo utiliza después de la extracción y antes de la mascarilla en el proceso de la limpieza de cutis. Como no afine mucho, puedes sentir cómo te pasa fugazmente una pequeña corriente eléctrica que, por supuesto, no es dañina sino sólo sorprendente y molesta.
El Belex es uno de los aparatos más básicos en estética. Si tu esteticista no lo usa, pregúntale el porqué: está restando calidad a su servicio y es uno de los pasos de los que no puedes beneficiarte en casa. ¡Pide un descuento!.
Cómo funciona
Que des un salto por cupla de la corriente, no suele pasar nunca. Fíjate en las dos posiciones de la foto superior: el dedo toca el electrodo, o no. Funciona así: la esteticista coje el aplicador con el dedo tocando el cristal y enciende el motor del aparato. Posa el electrodo encima de la piel del rostro del cliente y aparta el dedo. El electrodo entra en contacto con la persona que está estirada en la camilla y recibe la alta frecuencia.
En esa posición (imagen de la derecha en la foto), lo va pasando por las mejillas, la frente, la nariz. Cuando ha terminado el recorrido completo, es muy importante que vuelva a tener contacto con el aplicador antes de separarlo de la piel o le pasará la corriente al cliente. Volverá a tocar el cristal con el dedo y lo apartará de su rostro. Ya podrá apagarlo.
Beneficios de la Alta Frecuencia
¿Todo esto por qué?. Esa alta frecuencia se aplica en tratamientos estéticos tanto faciales como corporales. En el corporal, básicamente como técnica de reafirmación complementaria a algun tratamiento más completo.
En tratamientos faciales, todas las limpiezas de cutis deben incluirlo. Lo más preciado tras la extracción es la propiedad de cerrar los poros que se han abierto con el vapor para trabajar más profundamente. Es el sistema más adecuado para volver a cerrarlos en la medida de lo posible.
Además, es descongestionante y tiene una acción anti-bacteriana. Siendo una corriente eléctrica, no te parecerá raro que sea estimulante y tonificante.
Qué tipo de pieles se benefician más
Es esencial en limpiezas de cutis y otros tratamientos anti-acné: baja la inflamación y las rojeces al mismo tiempo que hace la vida imposible a la bacteria responsable del acné. Dos pájaros de un tiro.
Las pieles irritadas, congestionadas y reactivas la adoran. Pensad en la piel tras una depilación: ese es el tipo de rojeces a las que me refiero aquí.
Y la propiedad estimulante ayuda a esas pieles faltas de tono, a las que les conviene la cosmética revitalizante y anti-estrés. Cuando tratas la piel apagada con Alta Frecuencia le devuelven algo de vida, las tonifican. El efecto reafirmante también va por ahí.
La sensación cuando te pasan el electrodo
Tranquilos que no te pasa la corriente, ni se te ponen los pelos de punta durante horas ni prende fuego al acné. La mínima expresión de chisporroteo eléctrico pasando por tu rostro es como un masaje extraño. A mí me pone nerviosa, lo admito. Pero para mucha gente es de lo más relajante y les encanta.
Sientes el calorcillo del electrodo-aplicador que va pasando aquí y allá, y listo. Si creíais que íbais a sentir música o ver extraterrestres, siento decepcionaros. En limpiezas de cutis normales, la Alta Frecuencia dura a lo sumo 2-3 minutos. Es suficiente.
Es uno de los valores añadidos de acudir a un centro de belleza para la limpieza de cutis profesional. Iremos descubriendo otros. ¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que te hiciste una?.
Foto | Sorisa, phil_h
En Mensencia | Señores, los pasos de una limpieza de cutis , Cómo es un rostro masculino cosméticamente correcto