El traje será la opción mayoritaria de muchos para vestir esta Navidad. Dentro de las limitadas opciones que hay en el mercado masculino para vestir de fiesta, hay que jugar con los elementos que tenemos a nuestra disposición, entre los que destaca el color.
La paleta de colores ya es más amplia y podemos elegir desde el look más comedido al más extravagante. En esta ocasión me quedo con uno de mis favoritos: la elección del negro como único color a lucir, lo que viene a ser un total black look.
Hace ya tiempo, algunas marcas como Armani, a quien pertenece el traje de la imagen principal, propusieron vestir al hombre de negro completo en los trajes para asistir a eventos de gala y a día de hoy esta moda sigue estando muy vigente.
Los puntos a favor de este look:
- Muy elegante: el negro es un distintivo de clase. Pocos colores, salvo el blanco, dan una sensación de elegancia como lo consigue el negro.
- Estiliza la figura: el efecto óptico del negro hace que los kilos de más desaparezcan a primera vista, ocultándolos un poco. También saca a relucir los mejores cuerpos musculados.
- Nunca pasa de moda: cada año el negro está presente en todas las colecciones. En mayor o menor medida, las marcas siguen apostando por uno de los colores atemporales. Por lo que es una compra perfecta para rentabilizar en próximas ocasiones.
- Seriedad y saber estar: el negro añade años a quien lo lleva y aporta un porte que a veces muchos no tienen, pero ahí en cuanto hablan da igual el traje que lleven.
Los riesgos de este look:
- Demasiado oscuro: a muchas personas no les gusta vestir tan solemnes, como si fuesen de luto. Prefieren los colores más vivos.
- Demasiado monótono: un mismo negro en todas las prendas del look causará la monotonía y será más difícil llevarlo.
- No favorece tanto a según qué personas como otros looks.
- Un carácter demasiado serio: a veces un look así no concuerda con determinadas personas.
Claves para lograr un buen total black look:
- Hay que buscar un traje impecable, que se adapte a nuestra figura como un guante, nada de que nos esté grande o pequeño, tiene que estarnos perfecto.
- Diferentes tonalidades de negro: yo prefiero que cada prenda del look varíe un poco entre sí la intensidad del negro, no mucho, pero sí un mínimo toque.
- Los cuellos de la camisa que sean sin botones.
- La corbata que no sea ni fina ni gruesa, un término medio. Para mi gusto, o una muy buena lisa, que dé calidad al look o bien una negra con un mínimo estampado apenas perceptible por el ojo humano desde lejos. Una de rombos casi fantasmas, en negro y gris es perfecta.
- La chaqueta de dos botones. Uno de los cuales desabrochado, por supuesto. Además, a mí me gusta con un bolsillo falso a un lado.
- Zapatos negros impolutos. Yo prefiero un buen botín de piel, pero va por gustos.
¿Alguien se anima con este look para Navidad?
