Desde el lanzamiento en 2006 del tratamiento facial premium de Guerlain, Orchidée Impériale, la fórmula de excepción se ha ido perfeccionando más aun si cabe. El 2013 pasará a la historia de su album familiar como la tercera generación del cosmético anti-edad global: Gold Orchid, la Crema.
Una publicidad exquisita la acompaña desde sus inicios y honra su secreto más preciado: el Extracto Molecular de Orquídea Imperial (E.M.O.I.). A la Vanda Coerulea y la Vanda Teres, las dos principales especies de orquídeas, se añadieron otras hasta sumar siete plantas cultivadas y estudiadas en el Orchidarium.
A los beneficios de gran poder de regeneración de Orquídea Impérial (fluído, crema y crema rica), prolongando la juventud de la piel con la aplicación diaria, Gold Orchid aporta energía para que las células madre senescentes recuperen su vitalidad. Con el paso del tiempo, pierden movilidad, el intercambio de información intracelular se ralentiza y se deteriora. En el exterior de la piel, se traduce como signos de envejecimeinto cutáneo.
La fórmula de tercera generación de Orquídea Imperial se beneficia de la fuerza vital de estas bellas flores que permanecen impasibles al paso del tiempo una vez florecen. Gracias a su alto porcentaje en flavonoides, las mitocondrias de la célula dispondrán de la energía necesaria para esta fuerza vital de nuevas células a pleno rendimiento.
Es el futuro de los cuidados cosméticos de alta tecnología: la acción anti-edad global. Es decir, no se trata de reparar sino de mantener, de alargar la juventud de la piel desde el interior a nivel celular. Las arrugas, la flacidez, la falta de luminosidad llegarán algún día aunque no hoy. En el futuro.
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