La Reina Victoria Eugenia (Ena para los amigos)sentía debilidad por las joyas de los artesanos más prestigiosos. Una pasión que le venía de familia, ya que todos recordamos las fabulosas joyas de la malograda Zarina Alexandra, nieta también de la Reina Victoria de Inglaterra.
Cuando la bella princesa se casó con el Rey Alfonso XIII, los continuos devaneos amorosos del joven monarca y posteriores reconciliaciones se materializaron en maravillosas piezas de los joyeros más reputados. Desde hace algún tiempo, parte de los herederos reales subastan las piezas, mientras que la otra parte trata de recuperarlas.
La subasta del 15 de mayo en Christie´s promete ser de órdago, ya que según la prestigiosa casa de subastas, Marco Alfonso Torlonia, a la sazón hijo de la Infanta Doña Beatriz y sexto Príncipe de Civitella-Cesi, venderá una importante piezas del joyero de la Reina, un broche del siglo XIX, de zafiro y brillantes, que ha estado en manos de la Familia Real española desde los tiempos de la Regencia de María Cristina de Borbón.
Otras dos piezas serán subastadas el día quince, esta vez sin tanta historia de España a sus espaldas: un brazalete de diamantes estilo art déco de la firma italiana Bulgari y unos espectaculares pendientes de diamantes. El brazalete fue un regalo del Príncipe Alessandro Torlonia, padre de Marco, a su esposa, la Infanta Doña Beatriz, tía del Rey Don Juan Carlos.
Y mientras el principe de Civitella subasta el joyero familiar, su hermana menor Olimpia intenta recuperarlo por las subastas del mundo, la viuda del multimillonario alsaciano Paul-Annik Weiller, heredero de uno de los imperios financieros más grandes de Francia, ha rescatado muchas de las joyas de Victoria Eugenia que han salido a subasta en las últimas décadas.
Veremos en cuanto se rematan tan importantes piezas en Christie´s el 15 de mayo.
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