El queso es para mí un manjar exquisito por el que escalaría una montaña si supiera que existe una cabaña en la cima hecha de queso selecto. Con la sola visión de los quesos de Poncelet en la foto se me hace la boca agua.
Me saldría la vena egoísta y no compartiría con vosotros la ubicación de la cabaña de queso de mis sueños pero puedo daros una dirección en Madrid (no es la calle gourmet parisina) donde está el paraíso terrenal de los quesos de calidad: Poncelet, en Argensola 27. No he tenido ocasión de visitarlos pero comparto su pasión por el queso.
No os extrañará que tengan una selección de vinos a disposición del cliente, un maridaje perfecto con un buen rouge, al más puro estilo francés.
La foto superior os muestra una de las cuevas de maduración de su centro afinador donde esperan pacientemente los quesos llegar a su punto óptimo. Entre mis quesos preferidos está la Tomme de Savoie, el Gruyère suizo, el Cammenbert, un buen Roquefort y el Pave d'Affinois. Me derrito también por el Cantal Vieux. Nada que no pueda sustituir un excelente Manchego, Teta Gallega o un Mahón curado.
Este centro afinador de quesos es el primero que se instala en España y recientemente ha sido seleccionado como la séptima mejor tienda de quesos de Europa en el Top Ten Cheese Shops del Wall Street Journal.
Más información | Poncelet, Wall Street Journal En Embelezzia | En Francia, guarda espacio entre los platos y el postre, Gourmet de lujo