Vistas de impresión en tu casa de Brooklyn

Sí, definitivamente tengo que hacer una visita a esta ciudad, Nueva York, y a uno de sus barrios más emblemáticos, Brooklyn, porque no puede ser que las casas de las que me enamoro estén tan lejos.

Este nuevo piso entra directamente en nuestro especial Casas de Lujo por derecho propio. ¿Por qué? Porque el salón, el comedor, la habitación y la cocina se abren directamente a unas ventanas que rodean la vivienda y dejan que la ciudad sea un elemento más de decoración.

Entiendo perfectamente por qué en ciudades como esta no existen las cortinas. ¿Quién quiere tapar estas vistas cuando la ciudad se cuela en tu casa?

Comienzo con este impresionante comedor que ilumina la cocina, la mesa, y abre la vivienda, y que acoge también un salón que no puede ser más confortable. ¿Os habéis fijado en el detalle del baúl como mesa supletoria? De primeras, el edificio recuerda al Iron Building, y siempre pensé lo dificil que sería vivir en ese espacio.

Pues visto lo visto, me mudo ya. Una cocina abierta al comedor. Un pasillo distribuidor que te lleva a las habitaciones (hay viviendas tipo loft, de un dormitorio y hasta de tres), aunque casi todas parten de estas vistas impresionantes.

El baño es la parte que menos me gusta, la bañera creo que sobra, y es bastante estrecho en relación al resto de la casa, pero también se le puede sacar mucho partido, sobre todo teniendo en cuenta que el piso más grande cuenta con dos baños y los dos llevan bañera.

Me gusta la cocina por dos motivos. Por tener todo en ángulo, sin desperdiciar, y porque al darse la vuelta para comer, o hablar o estar con tus invitados, descubres la luz de la ciudad. ¡Es que no puedo dejar de mirar por las ventanas! Me imagino un día de tormenta, o el atardecer...

La habitación merece un espacio a parte. Me gusta esta decoración, aunque eso va en gustos, pero el cabecero me parece un acierto por dos motivos: sitúa la cama, y aporta un aire cosmpolita, masculino casi, como de despacho, sin alejarlo de la calidez de la piel.

Las zonas comunes, con un estilo propio. Una entrada casi de hotel, una azotea solario, un gimnasio, y un barrio con parques y zonas verdes que te devuelven de la tranquilidad de tu hogar a la vida relajada de barrio, a un paso de la Gran Manzana.

Se me olvidaba el precio... desde 348.000 euros, el tipo básico, el loft. Para las de uno, dos y tres dormitorios, mejor preguntar.