Hoy no parece ser un buen día para el mundo de la moda. Tras recibir la noticia del fin de la era Tisci en Givenchy, Ralph Lauren anuncia que su director ejecutivo no continuará trabajando en la firma, debido a una disputa de opiniones con el señor Ralph Lauren en persona.
Stefan Larsson, que lleva menos de dos años trabajando para la marca americana, abandonará su puesto a principios de mayo con un buen aliciente: recibirá 10 millones de dólares en conceptos de indemnización y seguros de salud durante los próximos dos años. Esta abrupta decisión se debe a las discordancias sobre como volver a dar vida a la firma, que ha sufrido muchas pérdidas en los últimos años y no logra conectar con el público millennial.
Según Ralph Lauren, él y Larsson no fueron capaces de ponerse de acuerdo con respecto a las nuevas direcciones creativas de la marca. "Ambos somos conscientes de la necesidad de evolucionar. Sin embargo, tenemos diferentes puntos de vista sobre como crecer en el aspecto creativo y de los consumidores. Después de muchas conversaciones hemos decidido separar los caminos".
Fotos | Gtres.
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