Ya lo he dicho, esto de los pelos de colores me tiene sorprendida. De momento no parece que ésta moda impuesta por Kesha y Nicole Richie haya llegado a la calle. Menos mal (aunque si yo fuera peluquera no diría lo mismo). Eso es constatable y cierto pero lo que es discutible es mi última apreciación: ¡Kesha parece Carrie!
Me explico. Cambiemos el pelo y la cara y pongamos el de Carrie Bradshaw y estos dos looks bien podrían haber aparecido en Sexo en Nueva York, especialmente en las últimas temporadas. Son chic pero arriesgados, los complementos son e xquisitos y denotan ser de alto standing.
Este look en concreto me recuerda mucho al llevado por Carrie cuando va a visitar su apartamento soñado con Big: vestido retro estampado de línea A y cinturón punk con tachuelas negro, en este caso sin tachuelas. Le pongo un pero, con ese pelo, este vestido hubiera sido mejor que no fuera azul. Y esa diadema ya es demasiado, el pelo de la primera foto hubiera sido perfecto.
En cuanto al pelo, prefiero este azul que el lila con el que aparecía ultimamente. Pero cuidado, pelo y ropa, nunca en el mismo color.
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