Cada vez somos más las que pasamos horas y horas frente a la pantalla del ordenador, ya sea en nuestra casa teletrabajando o en la oficina. Los trabajos sedentarios están a la orden del día, de hecho, según un estudio científico reciente de Jama Cardiology, las personas que permanecen sentadas más de 8 horas tendrían un riesgo de mortalidad y de infarto, insuficiencia cardíaca o enfermedades cardiovasculares entre un 17% y un 50% más que quienes pasan menos de 4 horas sentadas. Estos efectos secundarios ya están empezando a preocupar a ciertas empresas que proponen desafíos deportivos para sus trabajadores animándolos a no dejar atrás el ejercicios físico.
Evita la somnolencia en el trabajo
Las consecuencias de un estilo de vida sedentario pueden manifestarse en nuestra jornada de trabajo, ya que estas personas tienden a estar más cansadas, algo que podría comprometer las tareas que están llevando a cabo. ¿Cómo hacerle frente? Pues con ejercicio físico, así lo demuestra un estudio científico en el que se observó como los empleados que usaban una bicicleta con asiento en su oficina durante 22 minutos al día tenían mucho menos sueño entre la una del mediodía y las dos que aquellos que prescindían de ella. De esta forma los participantes en la investigación superaban con deporte ese conocido bajón que nos entra tras la comida en el que parece que nuestro cuerpo reclama una siesta, ayudándonos a estar bien despiertos durante el día.
Aumenta la concentración en el trabajo
Nuestros entrenamientos también podrían afectar a nuestra capacidad de trabajo. Una investigación publicada en el Journal of Applied Psychology observó en un análisis de 74 empleados como los que hacían ejercicio de forma regular, ya fuera antes del trabajo o en el mismo, acudiendo en bicicleta o saliendo a correr a la hora de la comida o incluso tomando clases de yoga en el mismo, lejos de cansarse les daba un chute de energía que aumentaba su concentración.
Mejora la vida familiar
Otro estudio publicado en Journal of Applied Psychology, dejó claro que el ejercicio físico habitual va mucho más allá de mejorar nuestra salud física y favorecer nuestra concentración en el trabajo. En el mismo se llevó a cabo un seguimiento de 72 empleados percatándose de que cómo los días más activos de los participantes coincidían con los que más se relacionaban con sus familiares. El deporte mejoraba la calidad de la vida familiar.
Ayuda a la recuperación tras el trabajo
En la anterior investigación también se observó como por la noche, aquellos que habían llevado a cabo actividades deportivas o habían andado más pasos en el trabajo, conseguían evadirse más del ámbito laboral al llegar a casa, desconectando con mayor facilidad y relajándose más. Algo que, además de ser un plus para la salud de los empleados, también ayuda a que rindan mejor al día siguiente. Los datos hablan por si solos y parece que reservar un tiempo de nuestra jornada laboral para el deporte, ya sea dando un paseo a la hora de la comida, subiendo y bajando escaleras o yendo a trabajar en bicicleta puede ser todo un acierto para mejorar nuestra vida dentro y fuera del trabajo.
Fotos| Nicholas Fu en Pexels, Ahmet Kurt en Pexels
En Trendencias | Cómo conseguir un six pack de escándalo en poco tiempo
En Trendencias | Ni Lidl ni Mercadona: estos son los supermercados más baratos según la OCU.
Ver 0 comentarios