Tinder: hablamos con cuatro usuarias que estaban enganchadas y ya no

¿Recordáis 2014, cuando todo el mundo hablaba de Tinder? TODO el mundo. El auge continuó y, durante un tiempo, parecía que había revolucionado la forma de conocer gente, de relacionarnos y de tener citas. Pero... no. Varios medios han hablado en los últimos tiempos de que Tinder ha muerto. A falta de datos oficiales, qué mejor que acudir a las usuarias para encontrar los motivos. Hemos hablado con cuatro de esas personas que, hasta hace aproximadamente un año, vivían pegadas al «deslizar a la izquierda» / «deslizar a la derecha» y nos han explicado por qué han buscado vida más allá de Tinder.

«Me aburrí de tanta mentira y postureo»

L.M. nos confiesa que estuvo bastante enganchada a Tinder hasta hace más o menos seis meses. Ahora, incluso ha desinstalado la app de su móvil. ¿El motivo? «Acabé cogiéndole tanto asco que pasé de estar todo el día enganchada a no poder ni verlo. En los últimos tiempos me parecía siempre lo mismo, todo lo mismo: postureo, mentiras y mucho malentendido. Tuve un par de citas buenas, pero, por lo demás, fue demasiado tiempo perdido en chats que no conducían a nada».

«La vida está en las nuevas apps»

M.G., en cambio, no cree que el universo de las citas online haya muerto, sino que es Tinder el que ha quedado un poco pasado de moda. «Sigo teniéndolo instalado en el móvil, pero cada vez lo utilizo menos. He probado varias app y es como si la moda fuera pasando de una a otra muy rápido. Ahora mismo, la que más utilizo es Down».

«Encontré pareja y... ya no lo necesito»

A.R. es un caso de éxito de Tinder que se le ha vuelto en contra a la app. Nunca la utilizó para citas esporádicas, sino para encontrar pareja, y lo hizo en la segunda cita que concertó a través de la app. «La verdad es que nunca me gustó demasiado el funcionamiento de Tinder, lo de ir pasando una galería como si fuésemos ganado. La utilicé en un determinado momento de mi vida porque llevaba mucho tiempo sin pareja y me apetecía probar algo nuevo y... supongo que tuve suerte».

«Sigue funcionando, pero ya no hablamos de ello»

P.R., en cambio, nos da una visión diferente. Según ella, Tinder sigue funcionando exactamente igual que siempre, pero, al haber pasado la novedad, ya no hablamos de ello. «Yo la uso al mismo ritmo que el año pasado y que hace dos. Y muchas de mis amigas también. Por supuesto, hay gente que lo ha dejado, pero también hay gente que se ha incorporado. No sé, creo que, simplemente, fue una revolución cuando empezó y lo teníamos en la boca todo el rato, pero ahora es ya algo cotidiano y no se le da tanta importancia».