Desde hace un tiempo a esta parte, Marie Kondo se ha colado en nuestra vida con su filosofía de orden. La idea detrás del método de la mujer japonesa más conocida del mundo es eliminar de nuestro armario todas las prendas que no nos aportan felicidad y tratar con cariño las prendas que sí.
Curiosamente, este método no solo se puede aplicar en nuestros armarios, sino también en otros aspectos de nuestras vidas, como nuestro timeline de Twitter o, por qué no, nuestra vida amorosa.
Dejar ir con agradecimiento lo que ya no es para ti
Una de las primeras cosas que recomienda el método KonMari es dejar ir cualquier objeto de nuestra vida que en algún momento quisimos, pero ya no nos genera ningún sentimiento positivo o, incluso, nos ata a sentimientos negativos y nostalgia no dejándonos avanzar. Eso sí, Marie Kondo recomienda dejar ir con cariño y agradecimiento.
Y es que, esos objetos significaron algo para nosotras y, para poder dejarlos ir y quedarnos en paz, debemos reconocerlo, agradecerlo y aceptar que, aunque en el pasado fueron importantes, ya no tienen un lugar en nuestras vidas.
Esto mismo se puede aplicar a nuestras ex parejas y relaciones que no funcionaron. Es el momento de dejar ir a esas personas que ya no aportan felicidad a nuestras vidas y a las que nos aferramos tanto con nostalgia como con enfado u odio, para no soltar el pasado.
Este es el momento de admitir que nos hicieron felices, que les quisimos, que estamos agradecidas por lo que en su momento nos pudieran aportar, pero que ya no pueden seguir formando parte de nuestras vidas, porque no nos hacen felices.
De esta manera, podremos dejar hueco en nuestros armarios, y en nuestras vidas, para la ropa y las personas que ahora mismo nos hacen felices y para las que vendrán y podrán hacerlo.
A la hora de volver a dejar entrar en tu vida asegúrate de tus emociones
Ahora que tenemos hueco para nueva ropa y nuevas personas, no tiene sentido ponernos a llenarlos sin control, con gente y objetos que ni fu ni fa. En algunos casos, cuando se queda un hueco en nuestras vidas, sentimos la necesidad de llenarlo cuanto antes para volver a sentirnos completas.
Se nos olvida que estamos completas tengamos la ropa que tengamos, e independientemente del número de personas que haya o no en nuestras vidas. Por eso, este es el momento de centrarnos en nosotras, aprender a ser felices con lo que tenemos, conocer nuestras emociones y disfrutar de lo que sí tenemos.
De esta manera, podremos saber si estamos dejando entrar a las personas porque realmente nos hacen felices o, simplemente, "por si acaso", igual que llenamos las maletas cuando nos vamos de vacaciones.
Quédate solo con las personas que te hacen feliz
Tanto si estás en una relación ya, como si no lo estás y estás conociendo gente, lo primero y principal es que nos quedemos únicamente con las personas que nos aportan felicidad.
A veces dejamos entrar a gente a nuestras vidas por no sentirnos solas, o mantenemos relaciones que no funcionan por miedo a lo desconocido. La realidad es que tanto en el amor, como en la amistad, las únicas personas que merecen la pena son las que nos hacen más y no menos felices.
Y aquí está la clave de todo y lo que el método KonMari nos puede enseñar: no te aferres a personas que no te hacen feliz. Tampoco en los casos en que alguien no nos haga infelices como tal, pero tampoco nos aporte felicidad. No es justo ni para ti ni para esa persona. Ambos merecéis conocer y tener en vuestras vidas personas que sí que os la aporten.
Las personas de nuestra vida no deberían estar para hacernos sufrir, sino para mejorar nuestras vidas. De ponerla más difícil ya se encarga el día a día. Mantén a tu lado gente que aporte, mejore y despierte en ti una sensación de felicidad y calidez.
Y cuando encuentres a esas personas, valóralas. Agradece su presencia, dóblalas y guárdalas con cariño en el armario de tu vida y tus emociones. Aprecia las emociones positivas que despiertan en ti y la fortuna de haberlas encontrado entre tanta acumulación de personas.
Imágenes | He is not that into you, Giphy
