En el documental de HBO (ahora Max), ‘Becoming Warren Buffett’, vemos la historia de cómo ha llegado a convertirse en uno de los hombres más ricos del mundo. Warren Buffett, CEO de Berkshire Hathaway, es un inversor que ocupa uno de los primeros puestos de la lista de milmillonarios de Forbes. Acumula más de 200.000 millones en efectivo que se resiste a invertir, aunque su fortuna asciende a los 135.400 millones de dólares, quizá algo menos después de que un fallo técnico en la Bolsa de Nueva York hundiera anoche las acciones de su empresa.
En el documental aparece alguien más, Bill Gates, que presume de que Buffett es un excelente mentor y un amigo. Ambos comparten algo que les ha ayudado a llegar hasta donde están y que, bien entendido, es un truco de productividad que podemos aplicar en nuestro trabajo: el enfoque.
El enfoque como truco de productividad
Cuando ambos hablan de enfoque en una de las escenas del documental, se refieren a tener un objetivo concreto y a trazar un plan para alcanzarlo. Saber cuál es la meta en todo momento y establecer un plan de actuación claro facilita que se produzca la consecución de este objetivo.
El enfoque no es solo concentrarse en algo, es una manera de abordar el trabajo que puede ayudarte a minimizar las distracciones, tomando además el control sobre tu tiempo y haciéndote por lo tanto más productiva. Estamos prestando atención a una cosa, por lo que se trata en muchas ocasiones de un proceso de priorización de tareas en el que debemos ignorar otras, lo que Steve Jobs afirmaba que era clave en su éxito: decir no. Mantenerse enfocado se trata de decir ‘no’ a mil cosas y mantener la inflexibilidad intencional.
Además de aprender a decir que no, enfocarse es evitar el multitasking y, como nos explica Jaime Rubiel en Forbes, definir bien tus metas. El experto en productividad recomienda definir qué quieres en tu vida. “Debes tener tres grandes metas para cumplirlas a medio plazo”, ya sea en un trimestre, semestre o año”. Eso sí “para ser equilibrado deberían ser dos metas en tu vida laboral, y una en tu vida personal”, explica. Con esas metas claras, es mucho más fácil empezar a trabajar en ellas.
Buffett también afirma que para triunfar y que ese enfoque se mantenga, es necesario elegir bien dónde trabajas. "Tenéis que buscar el trabajo que elegiríais si no tuvieseis que trabajar. Eso os supondrá menos incluso que trabajar para una empresa o personas que admiráis”, explicaba a los graduados de la Universidad de Nebraska-Lincoln. “Tiene que ser el trabajo por el que optaseis si no tuvierais necesidad de dinero, el trabajo por el que saltarías de la cama cada mañana", dijo Buffet.
También invitaba a los alumnos a seguir aprendiendo cada día, como hace Bill Gates con su regla de las cinco horas. El motivo es justo mantener ese enfoque vivo, porque ese conocimiento nos hará comprender mejor todo lo que rodea a nuestro objetivo. Por ejemplo, si mi enfoque es escribir una novela, formarme en escritura creativa, leer a otros autores del género en el que quiero publicar o aprender cómo está el mercado literario ahora mismo, me será de ayuda para consecución del objetivo y al estar enfocada en él, seré más productiva.
Y del mismo modo en que pensamos en las metas, en que nos formamos y enfocamos en ellas para alcanzar, es necesario un análisis de si lo que estamos haciendo está acercándonos al objetivo. Es decir, pensar en si es fructífero eso que hacemos y en lo que estamos invirtiendo tiempo, concentración, trabajo y esfuerzo.
Fotos | ‘Becoming Warren Buffett’ (Max)
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