La jornada laboral de cuatro días es un tema que va ganando cada vez más presencia en la conversación pública y que vuelve a estar de actualidad con la noticia de que el Gobierno belga ha llegado a un acuerdo para reformar su mercado laboral y concentrar la semana en cuatro días o flexibilizar los horarios para, según dicen, dar más libertad a los trabajadores. Sin embargo, antes de que saques el champán, esto no supone que se vayan a reducir las horas de trabajo.
El caso de Bélgica
Resumida a un titular, la medida parece jugosa pero la cosa cambia cuando se mira la letra pequeña. Y es que lo que se pretende es que los trabajadores belgas decidan si quieren concentrar el total de horas que deben trabajar en cuatro días a la semana, lo que aumentaría su jornada diaria, o repartirlas en cinco días como hasta ahora pero en el cómputo global deben sumar 40 horas semanales.
Los empleados, además, podrán optar también por un régimen semanal variable, en el que trabajando más horas una semana, puedan tener más tiempo libre a la siguiente. Otro aspecto interesante del acuerdo es el refuerzo del derecho a la desconexión para que los empleados no sientan presión por responder a mensajes o correos electrónicos fuera del horario laboral.
Cómo está la cosa en España
En España, un programa piloto para implementar una semana laboral de cuatro días se ha incluyó a finales de 2021 en los Presupuestos Generales del Estado. Sin embargo, al contrario de lo sucedido en Bélgica, este modelo pretende acortar el número de días laborales sin que haya recorte salarial.
En julio del año pasado, los trabajadores de Telefónica ya empezaron a probar de forma voluntaria la jornada laboral de cuatro días, convirtiéndose así en la primera gran empresa española que decidía experimentar con un programa de este tipo. En septiembre fue Desigual la que se atrevió. La firma de moda presentó a sus trabajadores una propuesta para implementar un modelo en la que, además, uno de los días fuese de teletrabajo, y abrió un proceso de votación entre sus empleados para que decidieran si se aprobaba.
¿Es la jornada laboral de cuatro horas el futuro?
Cada vez más estudios demuestran que el coste humano de trabajar más horas no solo se deja notar en nuestra vida social y familiar, también en la salud física y mental. Se ha encontrado que trabajar muchas horas puede aumentar el riesgo de padecer un derrame cerebral, una cardiopatía coronaria o desarrollar diabetes de tipo 2.
Dinamarca tiene la jornada más reducida de toda la Unión Europea con 37,5 horas semanales. Además, en septiembre de 2020, el ayuntamiento de Odsherred inició una prueba con la que prescindieron del viernes como día laborable para sus 300 empleados. Los buenos resultados del primer año hicieron que el ayuntamiento estudie extenderlo también a las guarderías municipales.
Otro ejemplo de resultados positivos es el de la filial japonesa de Microsoft, que aplicó la jornada de laboral de cuatro días en verano de 2020. Así, durante todo el mes de agosto, los empleados tuvieron los viernes libres. Lo que pasó fue que, aún reduciendo un 25% los días laborables, la empresa incrementó su productividad un 40% con respecto al mismo periodo el año anterior. Además, redujo el consumo eléctrico un 23%, el de papel en un 58% y un 92% de sus empleados aseguraron estar satisfechos con esta iniciativa.
No obstante, los expertos también señalan que deberíamos ser cautos con los resultados de estas pruebas aislados y puntuales de una sola empresa, ya que este tipo de experimentos se suelen llevar a cabo en organizaciones con una cultura laboral y de liderazgo abierta a este tipo de filosofía. Pero, cuando intentan el cambio empresas que no la comparten, puede suceder lo mismo que en Uniqlo Japón donde, para trabajar cuatro días a la semana, los trabajadores tienen que hacer turnos de 10 horas durante los días laborales, ya que simplemente se comprime la semana laboral de 40 horas en 4 días.
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