Con la llegada del buen tiempo apetece hacer escapadas de fin de semana, empezar la ruta de conocer rincones bonitos de España, que hay muchos, sin duda uno de los mejores planes de ocio. Y el pueblo de hoy os va a encantar.
Seguro que si hablamos de casas colgadas te viene a la mente las de Cuenca, pero no son las únicas que se conservan, ya que hay otro pueblo en España que tiene sus propias casas colgadas.
Se trata de Frías, un pueblo burgalés ubicado al norte de Burgos (a tan solo una hora), junto al Ebro, uno de los más bonitos de España y con mucha historia de la época romana. Un pequeño pueblo medieval de tan sólo 300 habitantes que destaca por su encanto, su entorno y su arquitectura.
Una de sus peculiaridades es que lo llaman "la ciudad más pequeña de España" porque ostenta el título de ciudad desde el siglo XV, cuando el propio rey se lo otorgó. Situado a 82 kilómetros al nordeste de Burgos, Frías tiene casas colgantes. Las casas, de toba y madera, han aprovechado el reducido espacio que le brinda “La Muela”, la gran roca sobre la que se asienta la parte alta de la ciudad. Como curiosidad, las paredes interiores de algunas casas están labradas en la propia roca.
Frías es considerado uno de los pueblos más bonitos de España no sólo por sus peculiares casas, también por sus estrechas calles empedradas con toques medievales, el Castillo de los Velasco, la iglesia de San Vicente, el Convento de Vadillo de estilo gótico, y una muralla del siglo XIII.
Está cerca del País Vasco, está lleno de historia y cultura, y lejos del bullicio de las grandes ciudades, que es lo que buscamos cuando decidimos hacer turismo rural.
Fotos | Ciudad de Frías, Las Merindades
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