Nike, una firma ligada al ¿deporte? y al estilo

¿No os ha pasado alguna vez que os fijáis en una cosa en particular y de repente empezáis a verlo por la calle día sí día también? A una amiga mía le pasó cuando se quedó embarazada: veía barrigas por todas partas, cochecitos con criaturas monísimas y familias la mar de felices. A mí esto me queda muy lejos así que me fijó en cosas de moda, y mi última obsesión son las zapatillas de deporte Nike. Y es que tener a un familiar trabajando allí ha hecho que las quiera absolutamente todas.

Y no sé qué pasa, pero desde entonces allá donde voy veo un nuevo modelo que me gusta, y los blogs han hecho que mi obsesión traspase fronteras. Y es que una de las últimas en caer en este vicio no ha sido otra que Miroslava Duma, aunque anteriormente ya lo habían hecho Leandra Medine y sus blazer (¡tengui!) o Aimee Song.

Atacadas por el flúor

No soy muy dada al deporte: la patosidad forma parte de mí (de allí a que me llamen Bridget Jones) aunque trato de cuidarme un poco. Pero antes de empezar a preocuparme por eso pensaba que todo lo relacionado con este mundo era tremendo: estilismos imposibles y zapatillas de deporte hipersónicas que te llevaban a la luna y al más allá. Pero lo cierto es que cada vez son más los modelos que tenemos a nuestra disposición y que se adaptan a las tendencias del momento, por eso podemos encontrar modelos running en flúor que no sirven para ir al gym...

De deporte nada

Pero Nike (hablo de esta firma en concreto porque ahora tengo un master en ella) no solo va relacionada con este ámbito: el mundo de la moda también entra en su gama. De allí a que su modelo Dunk Sky sea uno de los más lucidos a día de hoy. Las plataformas en este tipo de calzado son lo más y sus modelos molan mogollón.

Han tenido tanto éxito con este modelo que no han dudado en crear ediciones limitadas como el de las ciudades (Milán, London, Tokyo, New York y Paris) o las Liberty x London.