Ya sabemos que Bilbao es el destino ideal para una escapada de fin de semana o de puente, y el Museo Guggenheim es el lugar imprescindible por el que todo el mundo pasa. El interés en la visita varía según las exposiciones temporales que haya en ese momento, y ahora, con la muestra dedicada al arte chino contemporáneo, con el nombre de Arte y China después de 1989: El teatro del mundo, y a Chagall, el recorrido por el museo merece la pena.
China ha vivido una transformación impresionante en los últimos 30 años, y eso se ha reflejado en una expresión artística viva, sorprendente, inquietante, provocadora y audaz. La exposición Arte y China después de 1989: El teatro del mundo reúne una revisión del arte experimental para mostrar cómo han vivido los artistas chinos esos cambios convulsos en la realidad de su país.
Pasar del comunismo y de un régimen dictatorial al consumismo más exacerbado, a la reformas aperturistas y a un mundo más globalizado se refleja en las obras de performances, instalaciones con seres vivos, piezas de videoarte, y proyectos de activismo que explican los cambios sociales ocurrido en China desde 1989.
Una exposición que no deja indiferente al visitante y que sirve para conocer mejor un país fascinante y olvidar muchos prejuicios. El arte conceptual y experimental de la exposición invita a recorrer con calma los pasillos, fijarse bien en los detalles, leer las explicaciones para comprender el sentido y la razón de las obras. La creatividad de estos grandes artistas chinos contribuirá a ampliar nuestra visión del arte contemporáneo chino, que ha influido en muchos artistas actuales de todo el mundo.
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