Ahí donde la veis en la foto, con esa cara de buena, Laura Mercier es la dueña de uno de los más conocidos imperios de belleza. Nacida en la Provenza (Francia) y estudiante de Bellas Artes, un buen día decidió matricularse en la Escuela Carita de París para estudiar cosmética y más tarde trabajó con un prestigioso maquillador de la época, Thibault Vabre. En cuanto vieron su potencial comenzaron a rifársela y ya en 1985 visitó Nueva York para una sesión de fotos con la revista Elle. De aquella sesión le llovieron trabajos con los fotógrafos más conocidos del momento y con las revistas de moda más prestigiosas. Posteriormente trabajó con Madonna y pasó a trabajar para Elizabeth Arden y Chanel.
Laura lanzó en 1996 su propia línea de cosméticos, con la idea de que todas las chicas pudieran potenciar su belleza natural a un precio asequible, línea que actualmente vende en más de 20 países. En la actualidad aquella línea original de maquillaje se ha ampliado con cremas de tratamiento, línea corporal e incluso perfumes. Muchas de las celebrities más conocidas, como Julia Roberts, Kate Moss o Sarah Jessica Parker han pasado por sus manos para eventos internacionales como los Oscar, lo cual ha contribuido indudablemente a su estrellato. Además, Laura no para de investigar en nuevos productos, nuevas texturas, nuevos colores para añadir a su colección.
Su nombre es sinónimo de calidad y de cierto minimalismo en el mundo de la belleza, y, sobre todo, es la creadora del famoso Secret Camouflage, el conocido como posiblemente el mejor corrector del mundo.
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