Es posible que la boda que más se recuerde cuando se habla de la monarquía británica sea la de Carlos y Diana. Fue el 29 de julio de 1981. Pero la boda de la Reina Isabel II con el duque de Edimburgo el 20 de noviembre de 1947 marca un antes y un después. ¿Alguien recuerda haber visto sonreir a la Reina en algún otro vídeo?
Este año, 29 de abril de 2011, tenemos cita con la historia. Guillermo y Kate (por mucho que ahora se empeñen en llamar a su prometida Catherine) se casarán en la Abadía de Westminster. Y vamos a estar pendientes de todo. Ya sabéis lo que nos gustan en Arrebatadora las novias. Y si en el primer vídeo podemos ver el cortejo real y hasta una tarta de innumerables pisos, para este 2011 es posible que la historia nos depare grandes sorpreas.
Mientras llega el momento y descubrimos el vestido, el ramo, el peinado, el velo, las lágrimas, los invitados… me gustaría repasar con vosotras las últimas bodas reales en la Casa Real Británica. Empezamos por el padre del novio, el Príncipe Carlos (que parece que seguirá siendo Príncipe para siempre).
Su primera boda fue de cuento. Tal vez por eso su segunda boda, e imagen aquí arriba, haya sido de película. Porque para cualquier guionista hubiera sido calificado de loco si hubiera inventado un guión semejante para su vida real. Lo diré siempre, la realidad siempre supera la ficción. El matrimonio de Carlos y Camila luce una de esas sonrisas que lo dicen claro, “esto es lo que queríamos“. Aunque hayan tenido que pasar 20 años…
En 1963 se casó la princesa Alexandra. El vestido puede ser perfecto para cualquier boda del siglo XXI. Clásico, pero no pasa de moda. Muy elegante con ese bouquet.
En 1973 se casó la princesa Ana, con un final también poco feliz. Su vestido me sigue pareciendo de máxima actualidad. Dicen que es la princesa menos princesa. Me gusto su estilo: las mangas medievales, el cuello cerrado… puede ser una inspiración para las lectoras que estén buscando su vestido perfecto.
El 23 de julio de 1986 se casaron el príncipe Andrés y Sarah Ferguson. Boda de cuento, beso de película en el balcón y un final triste. Su vestido, similar al de Diana pero menos recargado sigue siendo un clásico de los vestidos de boda reales.
En 1999 se casarón el príncipe Eduardo y Sophie Rhys-Jones. Es el vestido que menos me gusta, que menos transmite. Lo veo hasta soso… Por no mencionar que el cuello estaba totalmente fuera de su sitio. Si a todas nos hacen pruebas días antes de casarnos, cómo no a una nuera de la reina… pues le estaba enorme.
El pasado verano pudimos ver a Tatiana Blatnik casarse con Nicolás de Grecia. Aunque, sin duda, la boda real de 2010 fue la de Victoria de Suecia.
Con este repaso a las bodas más importantes de la monarquía británica, ¿qué estilo creéis que elegirá Catherine Middleton? Por cierto, os dejo el enlace a la web oficial de su boda.
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