En 2021 llegaba a los cines una secuela que los fans ansiabamos y temíamos a partes iguales. El listón estaba muy alto y es que si pensamos en qué saga de ciencia ficción ha tenido un mayor impacto culturalmente hablando, hay una clara ganadora: Matrix. Desde su estreno en 1999, se convirtió en un hito cultural y cinematográfico que llegó para redefinir el género de ciencia ficción y sin saber que su influencia se extendería como la pólvora en la cultura popular, la narrativa, la estética y hasta en la filosofía.
Cuando se estrenó ‘Matrix Resurrections’, respiré, porque como bien apuntaban los expertos de Espinof, “la cuarta entrega de la saga es, por encima de su voluntad narrativa y dramática, una brillante y ácida bofetada a mano abierta al modelo de blockbuster franquiciado contemporáneo”. Y eso bien merece una noche de verano tonta en la que no sabemos qué ver en Netflix.
‘Matrix Resurrections’, una cuarta entrega más que buena
La película nos lleva años después de todo lo ocurrido en Matrix Revolutions. Neo vive ahora una vida ordinaria como Thomas Anderson en San Francisco. Sin embargo, comienza a tener extraños sueños y flashbacks de su vida como "El Elegido", lo que lo lleva a cuestionar su realidad. Morfeo lo busca una vez más para que vuelva a Matrix y descubra la verdad. Neo se embarca en un nuevo viaje para liberar a la humanidad de la Máquina y reunirse con su amor perdido, Trinity.
Keanu Reeves volvía a uno de sus papeles más conocidos encarnando una vez más a Neo. Junto a él, Carrie-Anne Moss como Trinity y Yahya Abdul-Mateen II como Morfeo, a los que se sumaron Jessica Henwick, Jonathan Groff, Neil Patrick Harris, Priyanka Chopra, Christina Ricci o Telma Hopkins entre otros.
Esta vez solo la dirige Lana Wachowski, que colabora en el guión junto a David Mitchell y Aleksandar Hemon. Y aunque no fue un aplastante éxito en cines, a los fans nos dejó más que satisfechos. Está claro que ‘Matrix’, era algo imposible de repetir. Tuvo tanto impacto que, como comentábamos al principio, repercutió en diferentes ámbitos.
La sombra de Matrix es alargada
A nivel técnico y puramente cinematográfico, ‘Matrix' introdujo técnicas innovadoras como el "tiempo bala" ("Bullet Time"), imitado en películas como ‘300’ y combinó efectos especiales con coreografías de artes marciales. Pero hizo más que dar un salto en el uso de los efectos especiales.
Favoreció que se abriera un debate sobre el libre albedrío vs. determinismo, sobre el transhumanismo y sobre la naturaleza de la conciencia. Desafió la percepción de la realidad como algo objetivo e inmutable, inspirando reflexiones filosóficas en películas como ‘Origen’. Popularizó la idea de que nuestra realidad podría ser una simulación, concepto que volvimos a ver en series como ‘Westworld’. Puso de moda la estética cyberpunk, con entornos urbanos distópicos y tecnología omnipresente e incluso el uso de códigos y frases de la película se convirtió en una referencia cultural en sí misma.
Se ha escrito mucho sobre la saga como alegoría trans, y la posibilidad de que los humanos se definan a sí mismos como quieran, fuera de las identidades impuestas por las máquinas. Más de dos décadas más tarde, sigue impactando y haciéndonos pensar. Como afirma Brian Raftery en The Guardian, “la película de las Wachowski de 1999 anticipó –y cambió– el mundo contemporáneo en el que estamos atrapados hoy”.
Fotos | Matrix Resurrections (2021)
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