Ayer por la noche se celebró en el Hotel Palace de Madrid la VII Edición de los Premios Hombres GQ. El mundo de la moda, la interpretación, la gastronomía y la comunicación se unieron para asistir a la gala de la revista masculina con más estilo del mundo.
La entrega de premios fue en la cúpula del Hotel Palace, que se vistió de gala para recibir a numerosos y conocidos invitados que asistieron de rigurosa etiqueta a la cena que organizaba la publicación tras la entrega de premios, presentada por Jose Toledo.
Con premiados de lujo como los hermanos Dean y Dan Caten (Dsquared), el genial cocinero Ferrán Adriá, el modelo Jon Kortajarena o la guapísima Martina Klein, el glamour estaba garantizado.
Por la alfombra roja desfilaron periodistas de la talla de Carlos Herrera, elegido mejor comunicador del año, que recibió el premio de la mano de una guapísima Marta Torné.
La periodista Concha García Campoy eligió un vestido en un tono azul agua y entregó el premio a Martina Klein, la mujer del año según los lecotres de GQ. La modelo, que acudió sola, eligió un vestido de color blanco roto que me llamó mucho la atención por llevar una manga larga y la otra con el hombro descubierto. Estaba increíble.
La guapísima modelo Marisa Jara, desfiló por la alfombra roja con un impresionante vestido lila, no apto para cardíacos, que mostraba las curvas de una de las mujeres más guapas del país.
Blanca Romero, mucho más recatada con un pantalón y una camisa negra dio el premio al mejor modelo del año al guapísimo modelo Jon Kortejarena. Impecablemente vestido con un traje chaqueta de cuadros bastante llamativo que si me lo pusiera yo por la calle me llamarían hortera, aunque me encantó. ¡Qué injusto es el anonimato!
El siempre elegante Rafael Medina, Duque de Feria, tampoco faltó al acontecimiento de la revista para la que colabora con un consultorio de estilo. Además el dueño de Scalpers, que vestía un impecable smoquin con sus ya consagradas slippers, otorgó a Lapo Elkhan el premio al mejor empresario internacional del año.
La delgadísima, aunque también imponente, Ariadne Artiles posó con su marido Fonsi Nieto que a modo de cotilleo diré que llevaba las mismas slippers que el Duque de Feria. Ariadne, que en esta ocasión eligió un vestido negro precioso, se encargó de dar el premio a los mejores diseñadores del año, Dsquared.
El diseñador David Delfín, adictos a este tipo de acontecimientos, asistió con un look muy informal formado por unos pantalones ajustados negros y camisa de cuadros negros y blancos que me encantó.
Eduardo Noriega, fue elegido mejor actor del año y recibió el premio de la mano del Director de cine Alejandro Amenábar. La música, como no podía ser de otra manera también estuvo presente gracias a Enrique Bunbury que fue elegido por los lectores de GQ como el mejor músico del año.
El deporte, cada vez más ligado al mundo de la moda, estuvo representado por el futbolista Leo Messi, que recibió el premio al mejor deportista del año.
El empresario Kike Sarasola recibió el galardón al mejor empresario nacional.Y el mundo de las letras estuvo representado por el escritor Fernando Sanchez Dragó que recibió el galardón al mejor escritor del año.
Otros de los asistentes fueron la ex Miss España Raquel Rodríguez y Maria José Besora, Eugenia Martínez de Irujo, María Pineda, Vicky Martín Berrocal o el cocinero Sergi Arola, que no se pierde una fiesta por nada del mundo.
Sin duda alguna, un gran acontecimiento. Muy bien organizado, muy elegante y un tributo a la moda masculina. Sí, señor!
