La colección resort 2020 de Carolina Herrera ha vuelto a abrir el debate sobre apropiación cultural. El Ministerio de Cultura de Mexico ha criticado la colección de la firma de lujo por lo que ellos consideran apropiación cultural. Desde el gobierno mexicano insisten que ese tipo de tejidos, estampados, bordados y colores es específico de ciertas regiones de México y de su población indígena.
La Secretaría de Cultura ha hecho llegar una carta a la firma de moda solicitando explicaciones. El director creativo de Carolina Herrera, Wes Gordon, afirma que es solo un homenaje a los paseos por Ciudad de México, a los atardeceres en Tulum.
El resto de su colección también se inspira en otros colores y lugares de Latinoamérica como Cartagena de Indias o Buenos Aires.
La colección de Carolina Herrera es ideal, mostrando el ADN de la firma y añadiendo toques coloridos y exóticos a los diseños de los vestidos.
Nos volvemos a encontrar con la misma polémica sobre la apropiación cultural de siempre. ¿Pueden los diseñadores de moda inspirarse en algo culturalmente propio de un país y que ha pertenecido a su población desde hace siglos simplemente porque es bonito?
Utilizando la inspiración cultural para un desfile de moda se despoja a la ropa del verdadero significado y del valor que tiene para la población que la luce a diario. Supone también una falta de respeto a la cultura del lugar.
Además, la secretaría mexicana plantea en su carta si las comunidades indígenas recibirán algún beneficio porque sus diseños han sido utilizados.
Fotos | Carolina Herrera