La campaña Resort 2020 de Prada se aleja de lo convencional con una original iniciativa que apela a la simplicidad y que no nos podría gustar más. Y es que la firma italiana se ha aliado con diferentes floristerías de Nueva York, Milán, París, Londres, Moscú, Shanghái y Tokio para poner a la venta, lo que podríamos bautizar como, unos preciosos ramos de flores de lujo.
Celosías amarillas y rojas, dalias rosas, lirios orientales blancos y girasoles componen estos aromáticos ramos que pueden customizarse al gusto del consumidor y que no se entregan envueltos en plástico ni en papel convencional sino en imágenes de la propia campaña, protagonizada por modelos, como Freja Beha Erichsen, Lexi Boling y Qun Ye, que pasean por la calle mientras transportan en brazos sus propios ramos envueltos en Prada.
Los fotógrafos encargados de documentar esta colección tienen estilos muy distintos pero ambos coinciden en la humanidad de sus retratos. Por un lado, el neoyorquino Drew Vickers, que es reconocido internacionalmente por sus retratos que consiguen reflejar con sensibilidad las sutiles emociones de sus modelos. Como contraste, también ha participado el japonés Keizo Kitajima, célebre por sus imágenes urbanas desde los años 70.
El objetivo es celebrar el lujo de lo cotidiano y la belleza de la vida. Mediante esta iniciativa, la campaña se integra en el día a día de las personas y traspasa la página de revista y de la pantalla del ordenador para convertirse algo que debe experimentarse y vivirse.
Se trata de una forma de mostrar la belleza, el romanticismo, la poesía y las historias que inundan los lugares cotidianos y que ya pueden encontrarse en floristerías como Bethel en Nueva York, I Fiorai di Piazza del Carmine en Milán, Maison Meunier en París, Petals at Bibendum en Londres o Flower Studio 55 en Moscú. Aunque solo por un periodo limitado de tiempo.
Fotos | Prada.