Estos son los pendientes más bonitos de Parfois que no me voy a quitar en todo el verano porque dan mucha luz y mis fotos lo prueban

Parfois lo está haciendo de diez. Desde hace unas temporadas un soplo de aire fresco se ha apoderado de la firma portuguesa y esa brisa ha logrado convertir en objeto de deseo todo lo que ubican en sus estantes y perchas, porque sí, ahora además de diseñar complementos también hay prendas.

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Las sandalias de invitada de Parfois que voy a llevar a todas las bodas este año: de tacón ancho y muy cómodas

Llevo comprando en la tienda portuguesa desde hace años. Recuerdo hacerlo cuando aún estaba en el instituto y, créeme, desde eso ya ha llovido bastante. En concreto salí hace 12 años, para que te hagas una idea. Y creo que desde entonces he recurrido para una cosa u otra a las propuestas de la marca: ya sea para completar estilismos de invitada de boda, comprar alguno de los bolsos en tendencia de este 2024 o fichar la maleta de cabina perfecta.

Una de mis últimas adquisiciones ha sido un par de pendientes que en un principio compré, bueno, lo hizo mi madre, o mi tía, para vestirme de flamenca en la romería de El Rocío. Sin embargo, tengo claro cristalino que los voy a llevar muchas, muchas veces durante el verano, ya que resultan muy favorecedores y dan mucha luz al rostro.

Trendencias Pendientes Parfois Verano Bonitos 1

Hablo de este diseño de abalorios extralargo, una cosa que me encanta, en naranja, uno de los colores en tendencia de esta primavera-verano 2024, y morado, una combinación que siempre es un acierto. Su precio es de 12,99 euros.

Pendientes maxilargos con abalorio de cuentas en naranja

PVP en El Corte Inglés — 12,99 €

* Algún precio puede haber cambiado desde la última revisión

Me los he probado y me encantan para llevarlos tanto con el pelo suelto como recogido y son tan llamativos sin ser exagerados que son los aliados perfectos para romper de forma guay cualquier look monocromático o compuesto a base de neutros. Una manera de llevar un pasito más allá esos estilismos más apagados o algo aburridos a los que recurrimos quizás en el día a día por falta de tiempo.