Trabajo desde casa desde hace años y si hay algo que me pone en jaque en el día a día son las distracciones. Los emails llegando, las notificaciones de whatsapp, las menciones que me llegan al móvil, pero sobre todo, las redes sociales en sí mismas. El algoritmo de TikTok e Instagram me conoce tan bien que puedo perder horas de mi día sin darme cuenta entre vídeos virales. Es casi imposible para mí tener un smartphone y no distraerme, por mucha fuerza de voluntad que tenga.
Pero he encontrado la solución contra todas estas distracciones y he conseguido no solo recuperar un equilibrio mental, también convertirme en una teletrabajadora más productiva. Y todo ha sido gracias a un truco al que llegué por error cuando buscaba métodos para comenzar a meditar: el “modo monje”.
Qué es el“modo monje” y cómo ponerlo en práctica
El “modo monje” implica dedicarse a una sola tarea sin distracciones. Se trata de buscar un estado de enfoque extremo y dedicación total a una tarea. Es decir, el “modo monje” pretende eliminar todas las distracciones durante un tiempo lo suficientemente largo para llegar a un estado de concentración más alto. El término, que se ha vuelto viral en TikTok, donde ya hay más de 81M de vídeos publicados con el hashtag #monkmode.
El “modo monje” utiliza la práctica de aislamiento y autodisciplina de los monjes, una forma de concentrarse en los pensamientos internos y alcanzar un estado de atención plena. Y para conseguirlo, debemos evitar las distracciones y eliminar de nuestro alrededor todo aquello que pueda robarnos la atención de la tarea que tienes que hacer.
Josh Wood, CEO de Bloc, explicaba en Business Insider que la mejor manera de empezar a utilizar el modo monje es empezar con cortos periodos de tiempo hasta lograr la máxima concentración. Para ello, lo primero es definir el objetivo a conseguir. Por ejemplo, en mi caso es terminar de escribir este artículo. El segundo paso es establecer un horario para conseguirlo y después, eliminar todas las distracciones. Y no, no es suficiente con fuerza de voluntad porque el simple hecho de escuchar las notificaciones ya nos distraerá.
Prepara tu espacio de trabajo y redúcelo a la mínima expresión. El minimalismo es una gran idea si teletrabajas, porque cuantas menos cosas tengas delante, más fácil te resultará concentrarte. Y descansa, no podemos mantener el “modo monje” las ocho horas de trabajo. Es importante tomarse tiempos entre las tareas para recuperar la concentración.
Una vez construido, toca convertirlo en un hábito para que realmente funcione, y eso se consigue a base de repetición a diario. En mi caso llevo practicándolo unas cinco semanas y ya noto que me cuesta mucho menos llegar a concentrarme que al principio.
Algunas aplicaciones que te ayudarán con el modo monje
Freedom, libertad en inglés, es una de las herramientas que pueden ayudarte si te pasa como a mí. Con ella puedes escoger redes sociales y sitios web específicos para bloquear, e incluso desconectar completamente el acceso a internet, lo que en mi caso me ayuda cuando tengo algún proyecto específico que requiere más concentración por mi parte. Con ella el deep work es más sencillo. Seleccionas cuánto tiempo quieres que dure el bloqueo en horas y minutos, y si terminas antes (te sorprendería saber lo eficaces que nos volvemos sin distracciones) puedes cambiar las opciones e incluso cancelarlas antes del tiempo que habías marcado.
ColdTurkey o FocusMe son otras de las opciones. También existe Forest, una aplicación que hemos probado también en primera persona, que está disponible para iOS y Android. Por cada sesión de estudio o trabajo en la que no tocas el móvil, se planta un árbol.
Por qué las distracciones son un enemigo a batir si quieres ser una persona productiva
Tal y como explica a la BBC Grace Marshall, autora y asesora de productividad, desconectarnos de las redes sociales, y de internet en general, no es fácil. “Recibes un aviso en un dispositivo y se crea un bucle abierto. Nuestro cerebro quiere cerrar ese bucle mirando la notificación porque recibimos una inyección de dopamina cuando cerramos el bucle”. El problema no es solo que nos dificulte la concentración y por lo tanto, la productividad, es que tiene un impacto en la salud mental según la experta.
Gloria Mark, profesora rectora de informática en la Universidad de California, recomienda evitar todas las distracciones que son las culpables de que no te concentres y que durante años se han disfrazado de multitarea. Según una investigación de la Universidad de Standford , somos un 40% menos productivos al intentar realizar varias tareas simultáneamente. Cada vez que cogemos el móvil para mirar algo, estamos interrumpiendo la tarea que realizamos y tardamos de media 20 minutos en volver a la misma.
La multitarea afecta al cerebro, ya que produce unos niveles de estrés por encima de la media y nos somete un estado de emergencia constante denominado sobrecarga alostática. Además, la ciencia ha demostrado que esa multitarea afecta a la memoria a largo plazo, a la retención de datos y al aprendizaje de procesos.
Con el “modo monje” he conseguido evitar la multitarea, las distracciones y las pérdidas de tiempo que me estaban costando demasiadas horas de trabajo.
Fotos | Halt and catch fire, Anabel Palomares
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