"Dejé de escuchar música y mirar la televisión cuando tenía 20 años", afirma Bill Gates. Su objetivo era entonces evitar distracciones que le impidieran pensar en software. Lo hizo durante unos cinco años. Ahora ha encontrado el truco para aumentar su productividad y la memoria sin perder la música que tanto le gusta.
La clave no es otra que la meditación, una práctica que hace mucho más que relajarte y que se usa en ocasiones con el objetivo de reducir el estrés y los síntomas de la ansiedad según Mayo Clinic. Pero lo cierto es que también tiene efectos en la concentración, la memoria y la productividad. Y no solo para Bill Gates. Mi mejor amiga lo ha probado y a ella también le funciona.
El truco de Bill Gates para aumentar la productividad: meditar
“Cuando evitaba la música y la televisión con la esperanza de mantener mi concentración, sabía que muchas otras personas estaban usando la meditación para lograr fines similares. Pero no estaba interesado. Pensé en la meditación como algo relacionado de alguna manera con la reencarnación, y no me lo creí”. Es lo que explica Bill Gates en esta entrada de su blog, justo antes de confesar que su esposa Melinda y él practican la meditación a pesar de sus prejuicios previos. Ahora la ve como una herramienta indispensable para mejorar su concentración y por lo tanto, su productividad.
El cambio de idea se produjo después de leer el trabajo de Andy Puddicombe, cofundador de Headspace, y ahora medita 30 minutos al día consiguiendo enfocarse y afrontar las tareas pendientes con más calma. Además, reduce el estrés y aumenta su memoria.
A nivel cognitivo, la meditación es capaz de mejorar la estabilidad emocional y optimizar el rendimiento cognitivo hasta en pacientes con enfermedad de Parkinson. Se dice incluso que la meditación es más efectiva para la concentración que cualquier estimulante. Su impacto se asocia al autocontrol y al estado de conciencia plena que se favorece con su práctica, aunque como bien nos explicaban en Vitónica, existe un lado positivo y otro negativo en la meditación, y no sirve para todos.
A nivel físico también tiene efectos. La meditación influye en diferentes zonas del cerebro que estimulan el correcto funcionamiento del metabolismo a nivel hormonal, e incluso hay investigaciones que señalan que puede influir positivamente en la composición de nuestra flora intestinal.
Cómo utilizar el truco de Bill Gates y empezar a meditar
Mi amiga Pepa comenzó a practicarlo hace unas semanas y a pesar de las dificultades al principio, afirma que superó la frustración de no saber hacerlo y consiguió calmar la ansiedad. El proceso no fue sencillo, pero uso la guía Headspace de meditación de Netflix que es justo lo que motivó a Bill Gates a empezar.
Si quieres ponerte a ello escucha lo que le dijo Paula Baldomir, profesora de yoga y practicante experta de meditación, a mi amiga: para empezar lo ideal es la meditación guiada. No quieras hacerlo sola porque no es tan fácil. Por suerte ella nos cuenta con todo lujo de detalle cómo empezó y cómo ha conseguido que sea parte de su rutina diaria.
En su caso ha conseguido reducir la ansiedad, ordenar sus pensamientos y dormir mejor y todo ello tiene efectos directos sobre la productividad.
Pero a Pepa no es a la única a la que la meditación le ha ido bien. Según la psicoterapeuta Charo Vázquez, “meditar nos ayuda a disminuir el estrés y las preocupaciones con las que hemos aprendido a convivir". Para Ana, la meditación fue clave para mejorar el bienestar mental, tal y como nos explicaba en este artículo. “Me lo recomendó una amiga cuando le confesé que vivía estresada con el trabajo. He sentido mi mente no sólo calmada, sino también relajada. En definitiva, he conseguido educar a mi mente y entrenarla para estar más calmada".
Fotos | Darius Bashar, Matteo Di Iorio y Cody Black en Unsplash
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