A quién no le va a gustar un pueblo abandonado lleno de misterio e historia. Pues eso mismo me pregunto yo. A mí, desde luego, es un tema que me fascina y la historia de Caudilla, un pueblo abandonado a tan solo una hora de Madrid me ha asombrado desde el mismo momento en el que la he conocido.
Se trata de un pueblo que, ahora mismo, se ubica en el término municipal de Santo Domingo-Caudilla, Toledo, pero que, en el siglo XIX era propiedad del terrateniente Claudio Ruiz y llegó a tener 188 habitantes, en unas 40 casas. El municipio actual, se debe a la unión, en los años 70, de Caudilla con Val de Santo Domingo, este último sí poblado y de mayor tamaño.
La historia de Caudilla empieza a cambiar durante la Guerra Civil española, momento en el que Claudio Ruiz y sus hijos varones fallecen durante el conflicto y son su mujer y sus hijas las que se quedan a cargo del pueblo.
Sin embargo, no terminan de recuperarse de la postguerra y la mecanización del campo acaba de poner la puntilla a este pueblo que, entre los 60 y 70 se queda vacío.
El tamaño del pueblo, ya os podéis imaginar, es más bien pequeño. Ahora mismo, cuenta con una sola calle pero, aún así, se pueden observar dos de los grandes emblemas del pueblo: el castillo de Rivadeneyra, construido en el siglo XV y la iglesia parroquial de Santa María de los Reyes.
Ambas construcciones están, por supuesto, abandonadas. Del castillo solo quedan en pie tres torres y un Cristo del Sagrado Corazón en las almenas, pero las fotografías que puedes hacer del mismo, sobre todo de noche, da mucho juego a los más fanáticos de lo paranormal.
Y es que, si preguntas en la zona, no es raro que te digan que hay fantasmas. Así lo señala, al menos, la Guía Repsol. Por tanto, no es raro ver a visitantes adentrarse en el pueblo abandonado de noche, esperando ver algún espíritu o, simplemente, sacar una foto espectacular del castillo y las casas abandonadas y en ruinas.
Evidentemente, si no crees en fantasmas antes de entrar en el pueblo, la sugestión de pasear por allí, con la única compañía de la sombra de lo que, algún día, fue este pueblo, te hará salir, si no creyendo, al menos sí dudando.
Para completar la estampa, si te alejas un poco de la zona donde están el castillo, la iglesia y lo que fuera la antigua plaza, puedes llegar al cementerio. Allí están enterrados Claudio Ruiz y sus hijos, José, Alejandro y Jesús con una cruz y un mensaje frente a sus lápidas: "esta tierra fue regada en 19 de septiembre de 1936 con la sangre de los mártires…".
Si los mártires regresan por las noches a sus tierras y casas abandonadas o no, os lo dejamos descubrir a vosotros cuando os paséis por Caudilla a hacerles una visita.
Fotos | Wikimedia Commons 1, 2, Felipe Cuenca Diaz en Flickr y santiago lopez-pastor en Flickr
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