Lo sabemos, te has pasado la tarde pintado las uñas de ese color que tanto te apetecía probar y en el primer descuido, ¡zas! adiós uñas perfectas.
Si esta historia ya te suena quizás te interese conocer nuestros ocho consejos para luchar con los enemigos de las manicuras duraderas.
Cuidado con los perfumes y geles con alcohol
Los esmaltes son muy delicados a los productos que contienen alcohol sobre todo en alta concentraciones caso de los perfumes o los famosos desinfectantes en gel. Si tu manicura está de estreno tendrás que evitarlos todo lo posible.
El tamaño sí que importa
Las uñas cuanto más cortas más resistentes ya que es menos fácil tropezarse con ellas y por lo tanto partirse. Tampoco hace falta llevar uñas al ras (eso ya para gustos) pero una uña media es perfecta.
Antes de pintar mejor limpiar
Antes de aplicar el esmalte las uñas deben de estar limpias de cualquier tipo de producto, sobre todo los grasos como pueden ser las cremas o los aceites ya que el esmalte no se adherirá bien.
Los expertos aconsejan limpiar las uñas con un poco de quitaesmalte mejor sin acetona. A mí personalmente me gusta más lavarme perfectamente las manos con jabón ya que daña menos la uña y porque no me gusta pintar directamente sobre las uñas por las que se ha pasado quitaesmalte previamente.
Por otro lado cuando ya se tiene la manicura hecha y seca también algunas cremas pueden hacer que el esmalte se vuelva más mate, un detalle a tener en cuenta.
Ojo con las tareas de limpieza
Los productos de limpieza no son precisamente delicados con la piel ni con las uñas debido a los químicos que contienen, deshidratando las uñas y dañando la piel.
Además tener las manos constantemente en agua tampoco ayuda demasiado. ¿Lo mejor? Usar guantes por mucha pereza que nos dé, solo así la manicura será más duradera y mantendremos unas manos cuidadas.
¡Hidrata bien esas uñas!
Uno de los problemas que hace que las uñas estén débiles es la deshidratación. Una uña deshidratada es más fácil que se parta y que se abra en capas haciendo que se levante también el esmalte, sin olvidar lo pesado que es no poder mantener unas uñas bonitas y sanas porque todo el rato se parten o se abren.
Para luchar con este problema es importante seguir una rutina de hidratación para lo cual existen aceites específicos aunque también podemos aplicar aceites como el de oliva previamente calentado o el de almendras que funcionan muy bien.
Que no se te olvide el top-coat
Para proteger, para sellar y encima aportar más brillo, el top-coat es todo un imprescindible sobre todo si buscamos una manicura perfecta y más duradera. Usarlo y no usarlo marca la diferencia.
Mejor dos que una
Después de mucho tiempo pintándome las uñas tengo claro que aplicar dos capas es clave para lucir perfectamente el color pero para que esas dos capas se vean perfectas y duraderas deben hacerse finas y esperando a que se seque perfectamente la primera capa antes de aplicar la segunda, así nos aseguramos de un esmalte mucho más fijado y evitamos que se marque sobre el esmalte cualquier roce.
Limar adecuadamente las uñas
Si las uñas no están perfectamente limadas, sobre todo despúes de cortarlas, será más fácil que se hagan capas ya que no están perfectamente selladas en el borde, con la consecuencia de que será más fácil de que se desconchen y... bye bye esmalte.
Foto | LF The Brand
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