Probablemente, ya lo estés notando en primera persona pero la AEMET lo confirma: el tiempo estable, seco y cálido del verano llega, después de mucho remolonear, para quedarse y con termómetros que llegarán esta semana a los 40 grados. Un cambio brusco que parece que tuviera la intención de recuperar el tiempo perdido.
Al menos hasta el sábado, cuando amplias zonas del país rondarán los 40 grados, prácticamente todo el país (excepto Galicia y Canarias) se encontrará con facilidad por encima de los 30 grados. No obstante, el calor fuerte afectará especialmente a Extremadura, al oeste de Castilla-La Mancha, al interior de Andalucía y el valle del Ebro.
Estas altas temperaturas se mantendrán también durante la noche, lo que dificultará conciliar el sueño en muchas zonas del país. No obstante, debido a una anomalía en la circulación atmosférica del Atlántico, se espera que no vayamos a tener un verano normal en España y que las entradas de aire esporádicas rompan la estabilidad meteorológica, dándonos pequeños respiros y volviéndonos un poco locos con cambios bruscos.
Algunas personas son más sensibles que otras a los cambios de tiempo. Un buen ejemplo de ello son las personas con problemas en las articulaciones o los huesos, que pueden sentir dolor cuando hay un cambio de humedad repentino. No obstante, ante un calor intenso, también se puede producir un aumento notable de la irritabilidad y la agresividad.
Para ayudarte a sobrellevar esta situación, hay algunos consejos fáciles que conviene tener interiorizados para anticiparnos al malestar:
Evita que entre el calor en casa
El primer consejo se ejecuta prácticamente solo y consiste en tener la casa en sombra. No des lugar a que lleguen las horas de más calor sin haber cerrado las ventanas y bajado persianas para que no entre la luz del sol directamente. Ábrelas únicamente a primera hora de la mañana, para ventilar, y durante la noche.
Genera humedad en casa
Las plantas de interior sirven para mucho más que para decorar. Cuando buscamos generar humedad en casa, podemos hacer uso de plantas de interior. Tal y como recomiendan los expertos de Decoesfera: "si las pones juntas y recién regadas por la mañana o por la noche la sensación de frescor también se extenderá a la habitación en la que se coloquen". Algunas de plantas más apropiadas para este fin son la palmera de bambú o Areka, la Sansevieria, los helechos o el Aloe vera.
Apuesta por las luces led
Las bombillas halógenas emiten mucho calor, además de generar un alto consumo. Por el contrario, las luces led nos ayudan a mantener el hogar más fresco, ya que no producen calor (y logran un consumo menor de energía). En la misma línea, se recomienda activar los electrodomésticos que producen calor (como el lavavajillas, por ejemplo) durante las horas más frescas de la jornada (siempre que sea posible, claro).
Opta por textiles ligeros y frescos
Opta por textiles ligeros y frescos y no solo a la hora de vestir. Las fundas de cama, los cojines o las alfombras son elementos que nos ayudan a crear una decoración digna de revista, pero tienen una funcionalidad mayor a la hora de hablar de frescor en el hogar. Elegir tejidos naturales como el lino y el algodón para el verano nos permitirá estar más cómodos cuando no echemos en la cama o en el sofá. en la misma línea, considera guardar las alfombras por ahora.
Foto de portada | Guzmán Barquín
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