Va a hacer frío-mucho-frío en la estación de esquí pero no es problema para que luzcamos un look de diseño y, además, con su pequeña historia de Thierry Mugler.
Estas dos prendas tan mullidas y de aspecto mimosín son del diseñador francés que, ni corto ni perezoso, ha repetido este 2007/2008 su colección Hiver Russe del 1986/1987 acercándonos la moda de aires gélidos de los años 80.
El bolso-manguito Grindelwald es para llevarlo a todas partes y mantener las manos calentitas y a salvo de tenerlas en dos días como la piel de una lagartija. De la chaqueta Esqui-Maude, me gusta su azul celeste irisado y por supuesto la fantástica capucha con mangas a juego con el manguito. Lista para salir.
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