No hay duda alguna de que la crisis sanitaria provocada por la Covid es una amenaza para nuestro bienestar físico, y ha dejado secuelas en la salud pública que, posiblemente, perduren un largo tiempo. Pero durante los últimos meses se ha intensificado la preocupación por los efectos y las secuelas que esta crisis ha tenido ya y seguirá teniendo en nuestra salud mental.
Sabemos que los casos de ansiedad, depresión y estrés postraumático han aumentado en los últimos meses en parte debido a la situación sanitaria, así como laboral, pero también al aislamiento que muchos de nosotros hemos sufrido.
Estos efectos en la salud mental parecen haber afectado de forma diferente a distintos colectivos. Los informes del Teléfono de la Esperanza señalan que los adultos mayores son una de las poblaciones más vulnerables, pero nuevas investigaciones señalan que las mujeres se han visto especialmente afectadas por la crisis sanitaria de la Covid. Es el caso de un estudio realizado en España, por la Universidad de Barcelona, que nos da pistas sobre cómo ha afectado esta situación sanitaria a la salud mental de las mujeres españolas.
La salud mental de las mujeres ha sido afectada de manera desproporcionada
En general, y como señala este estudio, antes de la pandemia las mujeres también teníamos un riesgo mayor de vernos afectadas por problemas de salud mental, como la ansiedad. Sin embargo, con la aparición de la Covid, esta particular brecha de género, que nos deja a nosotras en peor posición, también ha aumentado.
Los datos de esta investigación elaborada en España indican que en abril de este año uno de cada diez hombre decía sentirse más preocupado de lo habitual, mientras que la cifra subía a una de cada cinco - el doble - en el caso de las mujeres. De hecho, en ese mismo mes las mujeres presentábamos un riesgo un 16% mayor que los hombres de sentirse infelices o deprimidas. Para poner en contexto estos datos: en 2017 la diferencia era de un 6%.
Y no solo se trata de un efecto en la salud mental entendida como el riesgo de padecer ansiedad o depresión, sino que parece que las mujeres también tenemos más riesgo de sufrir trastornos del sueño, estrés o de sentirnos más desbordadas.
La precaridad laboral, el paro y la inestabilidad son la causa principal
El estudio, elaborado por el equipo de Pilar Sorribas-Navarro y Judit Vall Castelló, señala claramente la causa principal por la que las mujeres estamos siendo más afectadas por esta crisis sanitaria: el mercado laboral. Concretamente, entre el 46 y el 50% de esta brecha de género en salud mental se podía explicar por las diferencias existentes en las circunstancias del mercado laboral.
No solo se trata de que, de manera general, las mujeres tengamos una situación laboral más precaria, sino que también sufrimos de mayor inestabilidad laboral, menos ingresos y una mayor carga en lo que respecta al trabajo no remunerado. En una situación como la actual, el paro, los ERTE, así como la mayor carga en las tareas domésticas y el cuidado de los hijos, ha impactado más en las mujeres.
Este estudio también señala a posibles soluciones para que este impacto no sea permanente. Algunas de ellas pasarán por implementar políticas sociales, pero también por la búsqueda de ayuda y cuidado para nuestra salud mental.
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