La ciencia revela si es mejor beber agua directamente del grifo o es preferible filtrarla

Todo lo que necesitas saber sobre el agua del grifo que consumes a diario

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Desde hace un tiempo, cada vez más y más personas insisten en poner filtros en el agua del grifo con el fin de eliminar ciertos componentes de la misma y purificarla. Hemos visto como las jarras de filtro brita se posicionan entre uno de los imprescindibles de cualquier cocina, algo que nos ha llevado a preguntarnos, ¿es realmente necesario añadir estos filtros al agua que consumimos del grifo?

Parece ser que el agua del grifo, siempre y cuando se trate de países de ingresos altos y medios altos, a menudo supera en términos de seguridad al agua embotellada. De hecho, como explican desde Vitónica, el agua del  grifo es perfectamente saludable, ya que se trata de un agua que pasa unos estrictos controles de salubridad y la presencia de elementos químicos en ella es normal y no le resta calidad. Entonces, ¿es o no esencial filtrar dicha agua?

En numerosas ocasiones se recurre a las jarras de con filtro brita para purificar el agua del grifo. El problema es que muchas de ellas también son de plástico y ese intento de purificar el agua puede ser contraproducente por el propio material de la jarra. Por otra parte, es esencial destacar que este tipo de filtrado que elimina el cloro y reduce la dureza de agua, sustancias como la cal no las elimina del todo, además de que el filtrado tampoco suele ser constante y depende de la calidad del filtro.

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Desde Vitónica, también han aclarado que la presencia de cloro en el agua del grifo no entraña riesgo alguno para la salud en las concentraciones utilizadas y que, además, sirve para higienizar y desinfectar este líquido para que podamos beberlo sin preocuparnos por el desarrollo de patógenos. Por lo que esa insistencia en eliminarlo con filtros permanentes o jarras de filtro brita resulta un tanto innecesaria.

El agua del grifo es una gran opción de consumo sin necesidad de pasarla por sistemas de filtrados a mayores en nuestra casa, ya que previamente ha pasado unos controles de salubridad. En resumen, beber agua del grifo es una alternativa fantástica para reducir el consumo de plástico y cuidar, además de nuestra salud, también la del planeta.

Fotos | Julia Avamotive en Pexels, Karolina Kaboompics en Pexels

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