La freidora de aire se ha convertido en un básico para mis recetas del día a día. Desde hace un año se ha posicionado como ese indispensable en la cocina para poder convertir platos clásicos en su versión más healthy. Lo que no sabía, es que la forma en la que utilizo este electrodoméstico podría comprometer mi salud. Así lo han advertido desde la OCU, que insisten en que un mal uso podría llegar a provocar la aparición de una sustancia tóxica y cancerígena en los alimentos.
Las patatas fritas en la sartén ya han sido sustituidas en infinidad de hogares por las patatas en la airfryer, porque prometen ser más saludables. Lo cierto es que, cuando añadimos ingredientes a nuestra freidora de aire, como las patatas, que son alimentos ricos en almidón, solemos poner la temperatura a más de 195 °C, algo que favorece la formación de acrilamida. Esta sustancia ha sido señalada por la Organización de Consumidores y Usuarios, por su toxicidad y por ser cancerígena.
¿Qué es la acrilamida?
Se trata de una sustancia química que aparece de forma natural en los alimentos que contienen almidón cuando los cocinamos a temperaturas superiores de más de 120 grados. Así lo señalan desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria. Cuando consumimos productos que presentan acrilamida, ésta es absorbida por nuestro tracto gastrointestinal, distribuida a todos nuestros órganos y se metaboliza. Ahí es cuando se forma la glicidamida, uno de los principales metabolitos resultantes de este proceso y causante efectos adversos en nuestro cuerpo.
¿Cómo afecta la acrilamida a nuestro cuerpo?
Desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, insisten en los estudios científicos llevados a cabo en humanos, que revelan pruebas limitadas e inconsistentes en cuanto al aumento del riesgo de desarrollo de cáncer de riñón, endometrio y ovarios, relacionado con la exposición a la acrilamida mediante nuestra dieta. Pero también advierten, al igual que la OCU, sobre la acrilamida y su metabolito, la glicidamida, puesto que son genotóxicas y carcinógenas.
Resulta que nuestra versión healthy de las patatas fritas podría no serlo tanto como pensamos. ¿Descartamos esta receta de nuestro menú? No es necesario, la clave está en regular la temperatura por debajo de los 195 grados cuando cocinamos este tipo de alimentos que son ricos en almidón. Eso también incluye a los bizcochos y galletas, recetas que cada vez más y más gente intentamos adaptar a su versión para airfryer.
Otros alimentos ricos en almidón y, por tanto, cuya temperatura de preparación debemos de prestar especial atención serían: el pan, el arroz o la pasta. Si recurrimos a las freidoras de aire buscando una opción más saludable de consumir ciertos alimentos, es esencial no pasar por alto estos detalles, ya que la formación de acrilamida durante la preparación de los platos, podría ser contraproducente. Tomamos nota, total atención a la temperatura de cocinado de los alimentos ricos en almidón.
Fotos | Kawê Rodrigues en Unsplah, Engin Akyurt en Pexels
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