Seguridad Alimentaria ordena la retirada total de un popular pescado en España y pide que deje de consumirse

Una alerta europea exige que se retire este pescado por suponer un riesgo para los consumidores

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La Red de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) de la Unión Europea, más conocida como ese organismo que se encarga de coordinar la actividad de las agencias de Seguridad Alimentaria comunitarias como AESAN en España, ha comunicado un mensaje para que se retire de inmediato el atún claro que iba a entrar en España.

Así de primeras, puede llegar a sonarnos raro, dado que este pescado está muy presente en nuestra dieta y, hasta ahora, no nos habíamos pensado que su consumo pudiera ser alarmante, pero es que su orden de retirada se debe a una ruptura en la cadena de frío durante su transporte, algo que hace que no sea demasiado adecuado su consumo.

Como han explicado desde la RASFF, este incidente se ha señalado como un "potencial riesgo". En concreto, se trata de un cargamento de atún claro, un alimento muy consumido en nuestro país, que provenía de las islas Seychelles. Fue en un control fronterizo donde se detectó esa ruptura de la cadena de frío, algo esencial a la hora de conservar este tipo de productos.

No se han declarado casos de intoxicaciones ni enfermedades a causa de su consumo y tampoco se ha informado sobre las empresas productoras, ni las zonas del país de donde procede el atún claro que se ha retirado, algo que ha sido especialmente criticado por la Asociación FACUA-Consumidores en Acción, debido a una falta de información en dicha alerta alimentaria. Eso sí, en principio, al haber sido interceptado en un control fronterizo, no ha llegado a estar a la venta, algo que nos deja más relajados.

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Desde Vitónica, ya han alertado que los pescados son uno de los alimentos que causan más intoxicaciones alimentarias, algo que, principalmente se debe a la presencia del anisakis, un parásito que, en especies de pescado azul o graso, como por ejemplo el atún, aparece con una predisposición mayor que en otros pescados blancos o magros, como pueden ser la merluza o el lenguado.

Por esta razón, la legislación obliga en la industria alimentaria y a la restauración a mantener congelado todo el pescado que vaya a servirse crudo o poco cocinado, al menos a -20ºC durante 24 horas. Una gran idea para todos esos platos de ceviche o sushi, pero también en recetas donde optemos por consumir el atún o el salmón poco hecho.

Ahora, tras la retirada de este cargamento de atún, las autoridades españolas, junto con la RASFF y las aduanas, continúan vigilando de forma minuciosa todas las importaciones de mariscos y pescados, así como de todos esos tipos de productos más sensibles a la hora de alcanzar los estándares pactados por la seguridad alimentaria de la Unión Europea.

Fotos | Anastasiya Badun en Pexels, cottonbro studio en Pexels

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