Olivier Theyskens nos ha tenido engañados desde que mostró en Vogue algunos de los diseños que supuestamente formaban parte de su primera colección para Nina Ricci. La verdad es que, cuando los ví, no pude evitar pensar que se trataba de una colección que bien podría haberse vendido en las tiendas de Rochas, en el caso de que la marca siguiera existiendo.
Otro supuesto aperitivo de su nuevo trabajo han sido los fabulosos vestidos que Reese Witherspoon ha ido luciendo de gala en gala, incluído el azul tinta con el que acudió a los Oscars.
Sin embargo, ninguna de estas pistas han resultado ser muy fiables para hacernos una idea clara de cómo iba a ser su nueva colección de prêt-á-porter en París.
La crítica ha celebrado el nuevo aspecto de Nina Ricci. Aunque ese nuevo aspecto no lo es tanto para la mujer Theyskens. El corte al bies, los románticos vestidos de noche de corte sirena, y las lánguidas siluetas a base de pantalones, rectos y estrechos, combinados con algo más de volumen en la parte de arriba, siguen siendo las señas de identidad de las creaciones del modisto belga.
Sin embargo, en esta ocasión las prendas de día han tenido mayor protagonismo que el que tenían en Rochas, y no se han visto ensombrecidas por los maravillosos vestidos de noche. Los nuevos aires le han sentado bien al diseñador que ha sabido darle fuerza y vida a esa languidez, rejuveneciendo y modernizando su propio estilo, que es ahora el de la maison francesa también.
Quizá lo más destacable de este nuevo Theyskens, más joven y menos formal, sean las referencias a los años ochenta: con cremalleras, amplios jerseys de punto, y un look estudiadamente descuidado, el belga recupera para el próximo otoño algunas de las claves del estilo de una época no tan lejana como las que inspiran a algunos de sus compañeros de profesión. Y con ellas, vuelve además la mujer fuerte y urbana.
Vía | Elle Sitio oficial | Nina Ricci En Trendencias | ¿Theyskens a Ricci y Nilsson a de la Renta?, Theyskens firma con Nina Ricci
