Este invierno, todo se vale, al menos en lo que a calzado se refiere. Las sandalias con calcetines ya no son patrimonio de los turistas o de los paletos: en la pasarela hemos visto que pueden llevarse con elegancia y dignidad. Sólo hace falta encontrar un calcetín adecuado y, así, podremos seguir poniéndonos esas preciosas sandalias veraniegas que tanto adoramos. Se trata de aprovechar el calzado de verano durante el invierno, aunque también podemos combinar los calcetines con zapatos de temporada. Por ejemplo, con los botines que tan de moda están este invierno. La pieza estrella para los pies son, pues, los calcetines: gruesos, de lana, altos y de cualquier color. ¿Ya tenéis los vuestros?
