Las prisas y el ajetreo propio del día a día es algo que pude pasarnos factura a la hora de conciliar el sueño. Es cierto que para muchos ese estrés constante que traen consigo ciertas jornadas laborales hace que parte de la población caiga rendida en la cama, disfrutando de un sueño ininterrumpido durante la noche. Otros por el contrario, ya sea por no conseguir esa desconexión del entorno laboral al llegar a casa o por mantener aún de forma inconsciente dicho estado de alteración y adrenalina, vive una situación completamente diferente, en la que conciliar el sueño se vuelve una tarea complicada.
Existen métodos que ayudan a que podamos dormir mejor, el ejercicio es por supuesto uno de ellos, aunque es esencial no ejecutar rutinas fullbody justo antes de irnos a dormir. También hay que destacar la existencia de ciertas técnicas que marcan un antes y un después a la hora de relajarse antes de acostarse en la cama, y entre ellas es importante nombrar a la autohipnosis.
Aunque somos conscientes de que la hipnosis es un estado de profunda relajación del sistema nervioso, hablar de autohipnosis puede dejarnos al principio un poco desconcertados. Según indica Alejandra Vallejo-Nágera, psicóloga y colaboradora de Petit BamBou, es una técnica que consiste en inducirse a un estado de relajación profundo a uno mismo, pero con el objetivo de acceder al subconsciente, buscando modificar los patrones de comportamiento que nos perjudiquen.
Al acceder a esta parte del subconsciente a través de la autohipnosis podemos reprogramar nuevas actitudes, ideas o hábitos. Entre ellos podemos reducir el insomnio. Y es que a diferencia de la hipnosis no es necesario acudir a la ayuda de los expertos, ya que la autohipnosis la podemos llevar a cabo nosotros mismos, un método que además de ayudarte a conciliar el sueño practicarlo de forma habitual fortalece a la par la comunicación entre el cerebro consciente y el inconsciente.
Entre su lista de beneficios las investigaciones científicas han informado de que esta técnica podría servir como programa de tratamiento para los problemas de sueño relacionados con la menopausia. A la par también se han realizado otros estudios que hablarían de la viabilidad y seguridad de una intervención de hipnosis autoadministrada para mejorar el sueño en estudiantes universitarios.
¿Cómo puedo practicar la autohipnosis?
- Preparación: en esta primera fase prepararemos a nuestro cuerpo para llevar a cabo la autohipnosis. Para ello elegimos un lugar cómodo, con un ambiente tranquilo donde no tengamos distracciones y nos concentremos profundamente en aquello buscamos conseguir con dicha técnica para mandarle un mensaje claro al subconsciente.
- Inducción: en este segundo paso tenemos que concentrarnos en un solo estímulo y dejar de lado el resto de pensamientos. Es decir relajar el cuerpo y la mente con el fin de entrar en un estado de trance.
- Sugestión: en esta tercera fase nos disponemos a enviar el mensaje al subconsciente, todo ello repitiendo las palabras en voz alta o mentalmente, pero también podemos recrear ciertas escenas o emociones positivas relacionadas con el objetivo del sueño, en este caso.
- Salida: por último debemos salir de dicho estado de forma segura, ya sea utilizando una cuenta atrás, una palabra clave o un sonido que indique el final del proceso.
Hay que tener en cuenta que la autohipnosis requiere de práctica y mucha concentración para poder llegar a ejecutar bien cada movimiento y así poder beneficiarnos de todo lo que nos ofrece esta técnica.
Fotos | Rachel Claire en Pexels
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