Cada persona es un mundo y, al igual que muchas tienen la grasa localizada en zonas como la tripa, otras tienen a retener líquidos en las piernas. Lo primero que debemos saber es que los resultados no se obtienen de la noche a la mañana. La perseverancia, como todo en la vida, es la clave y empezaremos a notar resultados entre los 3 y los 10 meses, dependiendo del metabolismo.
Hoy hablamos sobre los entrenamientos que mejor funcionan para adelgazar nuestras piernas (siguiendo las recomendaciones de los expertos de Vitónica):
Ejercicios aeróbicos
Los expertos nos recomiendan dedicar dos o tres días a la semana a hacer ejercicios de pesas con el tren superior y otros dos o tres a hacer aeróbico extensivo (es decir, no mucha intensidad). De esta forma, las piernas no ganarán volumen, si no que utilizarán grasa y músculo al trabajar durante mucho tiempo.
Tienes un sinfín para elegir dentro de los ejercicios aeróbicos. Desde correr, hacer elíptica, bicicleta o nadar, por ejemplo. La clave es que encontremos una que nos guste para ser persistentes, obtener resultados y aguantar el máximo tiempo posible (desde 30 a 60 minutos por sesión).
Desde Vitónica apuestan por la natación, actividad en la que las piernas minimizan el trabajo intenso, al contrario que la carrera, donde son las piernas las que cargan con todo. También puedes probar con la bici: con 30 minutos al día lograrás tonificar tus piernas.
Burpees
Los burpees son un ejercicio clave para perder grasa (y además implican a casi toda nuestra musculatura). Con los burpees involucraremos todo el cuerpo y conseguiremos de este modo un trabajo muscular completo desde el punto de vista de la tonificación. Es perfecto para empezar la tabla de ejercicios, que irá seguida de sentadillas, zancadas, saltos a cajón...
Sentadillas
Las sentadillas son uno de los mejores ejercicios para perder peso y para estimular el sistema cardiovascular. Dada su intensidad, quemarás calorías de forma rápida durante la actividad y durante las horas posteriores.
Para realizar la sentadilla perfecta, busca la postura inicial ideal, coloca el peso sobre los talones, utiliza la respiración para facilitar el ejercicio, encuentra tu profundidad ideal y no redondees la espalda.
Zancadas
Según nos explican desde Vitónica, las zancadas son otra forma de trabajar la fuerza de nuestro tren inferior y un buen complemento al trabajo con las sentadillas.
Para añadir dificultad al ejercicio, se puede optar por sujetar algún peso con una de nuestras manos, obligándonos a compensar el "desequilibrio" con un mayor trabajo del core.
Saltos a cajón
También conocida como la clásica subida al banco. Es ideal para trabajar la potencia del tren inferior. Si lo realizamos a una velocidad lo suficientemente intensa y elevada, conseguiremos un efecto similar al de los burpees. Además los saltos al cajón admiten múltiples variantes para no aburrirnos.
Fotos | Pexels, Vitónica