9 canciones para superar una ruptura por San Valentín

San Valentín. El universo de lo cuqui en forma de corazón y color rosa. El plan habitual de cena con tu chico en un restaurante especial, intercambio de regalos y noche de lencería fina ya nos lo conocemos. Pero, ¿qué pasa con las que estáis pasando por una ruptura reciente?

Mi propuesta es que os rodeéis de buenas amigas, cambiéis San Valentín por San Ballantine's y pongáis buena música. Hay recetas que siempre son infalibles. Vamos a intentar ayudar un poco con la elección de la música, que va a depender del momento de la ruptura en el que estéis.

Fase 'Nunca jamás volveré a amar así'

Aquí hay que sacárselo todo para fuera. Vamos, que hay que llorar. Llorar a moco tendido, con caja de pañuelos al lado y amiga con hombro acostumbrado a esas crisis. Sí, habéis acertado. Es el momento de Adele.

Fase 'Todos mis recuerdos le pertenecen'

Quiera Dios que el desamor que os acaba de sobrevenir no sea con un novio de esos eternos, desde la adolescencia. Debería haber una ley que obligue a las parejas adolescentes a romper lo antes posible para evitar esas masacres emocionales posteriores. Si es vuestro caso, hay que pasar una fase de regresión a los tiempos felices del instituto y, sí, como en el caso anterior, llorarlo todo.

Fase 'Te odio con toda mi alma'

Esta fase siempre llega. En el desequilibrio emocional post ruptura siempre hay un momento de odio extremo, en el que detestas con especial saña todo aquello que antes te encantaba de él. El cerebro humano es una cosa muy loca. ¿Cómo se combate esta fase? Por Dios santo, con la Jurado, claro. Es obligatorio cantar el estribillo a gritos con tus amigas. A gritos, si no no vale.

Fase 'Esta relación ha sido un error'

Aquí puede que ya no odies con la saña esquizofrénica del punto anterior, pero todavía estás convencida de que esa relación ha sido un error, que habrías estado mejor sola y que te has perdido cosas maravillosas de la vida por culpa del estúpido engreído, egoísta y caprichoso. Pues ya tenemos canción, el título lo dice todo.

Fase 'Nunca vas a encontrar a alguien mejor que yo'

Puede que llegue ese dramático momento en que te enteras de que tu ex está con otra. Y finges de una manera fantástica que no te importa nada porque estar con él es un error y pobre de ella por tener que aguantarlo. Además, a ti te dio sus mejores años y a la nueva le tocan los restos, ¿no? Pues que pase Julito, por favor.

Fase 'Jamás dejaré entrar a otra persona en mi vida'

Por supuesto. Ese momento en que, en aquelarre de amigas, juras por Dior que en tus siguientes relaciones serás implacable y no permitirás que los sentimientos se te desborden. De los diecisiete fracasos sentimentales anteriores deberías haber aprendido que tienes la sangre caliente y te vas a volver a enamorar como si no hubiera un mañana, pero no es el caso. Da igual. Hoy es San Ballantine's y toca jurar que nuestra vida es nuestra y nadie podrá alterarla. Y, ya de paso, conjurar a ese cantante del que estábamos enamoradas en la adolescencia.

Fase 'Que pase el siguiente'

Aceptar las rupturas con inteligencia emocional y, sobre todo, con mesura, es una asignatura pendiente para muchas. Y así llega ese día. Ese. El día en que te haces una sesión de belleza casera, te calzas la minifalda, el taconazo y sales a matar. Y ese primer chico que te hace ojitos te parece una opción ideal para acabar la noche porque... no nos contemos mentiras, que ya somos mayorcitas: el primero siempre es por venganza. Y, mientras el pobre chico intenta hacerte olvidar a tu ex a fuerza de besos, en tu cabeza resuena Amparanoia.

Fase 'Lo he asumido'

De verdad, ese día llega. Parece que no va a llegar nunca, y cuando más forcemos artificialmente, más trabas nos vamos a poner en el camino. Así que ese día en que nos levantamos llenas de fuerza y sin melancolías, ni nostalgias, ni odios ni nada... ese día es fantástico. Así que toca celebrarlo a tope. Y pocas canciones se me ocurren más fuertes que esta.

Fase 'No querré a nadie más de lo que me quiero mí misma'

Esta es un poco una prolongación de la anterior. Aquí ya no solo es que lo hayas superado. Es que vuelves a disfrutar de esas pequeñas cosas de la vida que olvidamos cuando estamos en pareja: los viajes con amigas, las noches de ligoteo sin fin y esa parte loca de nosotras mismas que baila bajo la lluvia. Que sí, que bailar bajo la lluvia es un tópico, pero es un tópico que sienta de maravilla. Y mejor aún, con esta banda sonora.